Colas en la frontera con Gibraltar. EFE/Archivo



En una absoluta ceremonia de confusión, el acto de oración conjunta España-Gibraltar que el arciprestado de la Línea había afirmado en nota oficial que no se celebraría el jueves como se había anunciado por haberlo desconvocado el obispo del peñón monseñor Ralph Heskett, sí tuvo lugar, pero solo en la roca. Acudió el prelado de Gibraltar y fieles de ambos lugares portando velas. Rezaron en la Verja para pedir por la normalización de las relaciones con España. Ahora bien, no hubo representación del clero español que se desmarcó de la ceremonia.

Sí que estuvieron presentes los sacerdotes católicos gibraltareños que caminaron en procesión con fieles de ambos países hasta la catedral, donde el obispo Heskett ofició una misa por la paz en la que se pidió “por todas las personas que están sufriendo la situación del paso de la frontera a diario” y “rezamos también por los guardias que están en la frontera, que tienen órdenes que cumplir”.

El arcipreste le echó la culpa al obispo inglés
Como ya publicó EL PLURAL.COM, el arcipreste de La Línea, Juan Antonio Valenzuela García, había suspendido la reunión conjunta a la que se había llamado incluso desde los púlpitos de las iglesias de la zona el anterior domingo afirmando que “El acto de oración ha sido desconvocado por Monseñor Ralph Heskett, ante las interpretaciones políticas y sesgadas que se están haciendo y que han tergiversado el sentido religioso del acto programado”.

¿Qué les pasó a los curas españoles?
¿Recibieron las autoridades eclesiásticas de Cádiz y La Línea alguna llamada de atención ante esta iniciativa de oración conjunta para pedir por la resolución de los problemas de España y Gibraltar? Esta es la pregunta que se hacían ayer los fieles llanitos que acudían sorprendidos a la oración que sí se celebró en Gibraltar. Y la segunda interrogante: ¿Por qué achacaron la anulación de la ceremonia a la voluntad del obispo inglés?

Heskett triste y decepcionado
Lo cierto es que algo más de 500 feligreses de ambas diócesis (la española y la inglesa) estuvieron presentes en la vigilia que se realizó en la Catedral gibraltareña de Santa María la Coronada. Monseñor Ralph Heskett declaró al diario Gibraltar Chronicle sentirse decepcionado y triste por la ausencia de los curas españoles. “Tienen sus razones para no venir, ahora tendremos que orar dos veces más”.

Posible cuestionamiento a los ministros
Como ya publicó ELPLURAL.COM algunos vecinos de La Línea habían trasladado su impresión de que para los ministros de Interior y Exteriores españoles de marcada tendencia católica, esta iniciativa de la diócesis gaditana podía entenderse como un cierto cuestionamiento a su política proveniente de ámbitos cristianos. Ayer, estos comentarios volvían a producirse.

Trabajadores españoles repartieron folletos
El Gibraltar Chronicle da cuenta de la celebración de la vigilia y de la misa en la catedral a la que acudieron principalmente trabajadores fronterizos en procesión portando una cruz y una pancarta en español bajo el lema “por una frontera digna de ser llamada europea" La Asociación de Trabajadores españoles en Gibraltar repartió folletos animando a los trabajadores transfronterizos a unirse a la ceremonia.

“Oramos por los que sufren por la situación”
Durante la procesión, el padre Stuart Chipolina leyó un mensaje del obispo a los asistentes recalcando que el encuentro tenía como objetivo exclusivo la oración. "Oramos por aquellos que sufren como consecuencia de la situación actual, y también por aquellos que son capaces de producirla. Rezamos por lograr la guía y la bendición de Dios en nuestras dos comunidades”. Asimismo, en el camino a la Seo, los fieles rezaron por las víctimas de la catástrofe de Filipinas.

Lugar de acogida y encuentro
Durante la homilía de la misa, en una catedral llena de feligreses, el obispo habló de cómo durante siglos Gibraltar había sido un cruce de caminos donde el Mediterráneo y el Atlántico se encuentran. “Una posición geográfica que ha ayudado a dar forma al lugar y al carácter de sus gentes. Las encrucijadas son puntos de encuentro naturales y Gibraltar se ha convertido en un lugar de auténtica acogida y encuentro de los pueblos de todo el mundo”, dijo.

Testimonio por lo que es justo
El obispo enfocó esta ceremonia religiosa como “un testimonio por lo que es bueno, correcto y justo. Un testimonio de nuestro respeto por los demás, dentro de nuestra comunidad y más allá. Pero, quizás, lo más importante de esta noche , es un testimonio de nuestra profunda creencia en el poder de la oración. "

Encuentro y diálogo
El prelado concluyó: “Rezo para que este encuentro en la oración sirva para ayudar a fomentar y a profundizar una cultura de encuentro y de diálogo que nos lleve juntos por el camino de la paz.” Entre los presentes se encontraba Mario Hook, Defensor del Pueblo de Gibraltar quien dijo estar allí a título personal para apoyar al Obispo en su iniciativa.

El obispo de Cádiz ¿sin fronteras?
Otro diario gibraltareño, el Panorama Daily, incluye en su crónica del evento una crítica a la actitud del clero español: “Fue el obispo de Cádiz quien una vez dijo que la universalidad de la Iglesia Católica no tiene fronteras o limitaciones territoriales; que busca la fraternidad , la unidad y la convivencia pacífica y la armonía de las personas y de los creyentes y los encuentros frecuentes entre Gibraltar y La Línea . La iglesia española como vimos ayer pasó por encima de sus propias palabras.”