La que fuera ex dirigente del Partido Popular en el País Vasco, María San Gil, de la línea más aznarista de la formación, ha regresado al foco mediático para hacer un llamamiento a Pablo Casado y Santiago Abascal. Ha implorado a los dos líderes que tengan “altura de miras” y unan a un “constitucionalismo” que han abandonado desde el PSOE, según desliza en esta entrevista concedida a ABC.

San Gil ha ensalzado la figura de Gregorio Ordóñez, asesinado por ETA el 23 de enero de 1995, mientras aseguraba que la banda terrorista no ha sido derrotada. Unas afirmaciones que se han extendido en la derecha española en las últimas fechas. De hecho, la exdirigente de los populares en Euskadi se ha referido a ETA como el “brazo armado” de Bildu.

Ha deslizado que el discurso de Bildu en el Hemiciclo durante la investidura de Pedro Sánchez es un “fracaso de todos”, aunque matiza que es más de unos que de otros. San Gil duda sobre cómo los socialistas “mirarán a los ojos de quienes han tenido víctimas en sus familias” al pactar con el partido de la izquierda abertzale.

Lo decimos hace mucho tiempo, ETA no está derrotada”, aventuraba en esta conversación con el diario ABC. Considera que el problema es “el constitucionalismo” porque el PSOE se ha aliado con “quienes quieren romper España”. Señala a Pedro Sánchez como el principal causante e indica que la única solución pasa por “plantarle cara con una alternativa contundente, firme y sólida” para defender la unidad del país.

Sostiene que la unidad de España, la constitución y la nación son valores que el “centro derecha tiene que unir”. Asimismo, ha cargado de forma subrepticia contra Mariano Rajoy, arguyendo que ella, siendo “militante de base”, abandonó el partido en 2008 porque “algo de lo que se estaba haciendo no me gustaba”.

San Gil sostiene que este Gobierno es la culminación de un proceso que nace en 2004 en la “negociación de Zapatero con ETA”. “Quieren destruir el modelo social y político de España para que Bildu y los nacionalistas puedan seguir exigiendo su independencia”, subraya. A través de esto explica por qué abandonó su partido, alegando que hubo cosas que Rajoy no hizo bien durante su liderazgo en Génova.

Unión de PP y Vox

No obstante, ha pedido no “meterse los dedos en los ojos los unos a los otros” y mirar hacia adelante. María San Gil ha implorado a Pablo Casado y Santiago Abascal que abandonen las diferencias y se “unan” para ser la “alternativa cultural al frente popular”. “No se trata de siglas ni de personalismos”, declara la ex presidenta del PP Vasco.

“Ya han demostrado los de enfrente a lo que están dispuestos a llegar y tenemos que actuar”, ha sentenciado San Gil, quien desea que “Santi y Pablo” se den cuenta de la “gravedad del momento” y gesten una “alternativa constitucionalista” para hacer frente al PSOE de Pedro Sánchez. “Defender España no es cosa de los fines de semana ni de tener una tribuna en el Congreso”, zanja.