La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil detuvo este miércoles a Antxon Alonso, el socio del exsecretario de organización del PSOE, Santos Cerdán, en la misma operación en la que también fueron arrestados la exmilitante del PSOE, Leire Díez, y el expresidente de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), Vidente Fernández, por presuntas irregularidades en contrataciones públicas. Fuentes de la investigación han confirmado a la agencia Europa Press que, hoy, los agentes de la benemérita están practicando registros en Zaragoza, Sevilla y Madrid en relación con empresas vinculadas a la sociedad mercantil que según la UCO está vinculada a Cerdán. Asimismo, han indicado que no hay previsto detenidos en esta nueva fase de las diligencias del Instituto Armado.
Alonso comparecerá ante la Audiencia Nacional entre este jueves y el sábado ya que los detenidos pueden pasar a disposición judicial en un máximo de 72 horas. Será entonces cuando el titular del juzgado Central de Instrucción Número 6, Antonio Piña, decida si le envía a prisión provisional o si les deja en libertad o sin medidas cautelares.
Los registros y las detenciones forman parte de una operación en marcha que mantienen los agentes de la UCO por orden del juez, en el marco de una causa que permanece bajo secreto de sumario y que ha sido impulsada por la Fiscalía Anticorrupción. El que fuera sustituto de José Luis Ábalos en la Ejecutiva del PSOE, Cerdán, tras pasar 142 días en la prisión de Soto del Real por un notable riesgo de destrucción de pruebas, se encuentra en libertad provisional desde hace tres semanas.
Alonso tiene en Cerdán su nexo con el poder del PSOE. La relación entre ambos va más allá de la amistad y es que, tal y como informó la UCO, el primero firmó en 2016 una escritura privada por la que Santos Cerdán pasaba a tener un 45% de las participaciones de Servinabar.
Tal y como ha desvelado OkDiario, Fernández, otro de los detenidos en la operación, maniobró, presuntamente, para la concesión de un préstamo público de 48,7 millones de euros desde la SEPI a la armamentística vasca SAPA, tras trabajar en Servinabar. La operación se formalizó en diciembre de 2022, cuando Fernández Guerrero ya figuraba en la nómina de la mercantil asociada al exdirigente socialista Santos Cerdán y al empresario vasco Antxon Alonso. Además, Servinabar 2000 SL es la sociedad investigada por pagar mordidas de contratos públicos en la trama Koldo y SAPA pagó 145.200 euros a Servinabar entre 2021 y 2022.