En una semana en la que Pedro Sánchez se reunirá con los líderes de los principales en su intento de formar gobierno, Gabriel Rufián ha cargado contra uno de los futuros socios del presidente en funciones. Se trata de Pablo Iglesias, al que critica por su exceso de “testosterona” al amenazar con unas nuevas elecciones si no entran en el Ejecutivo.

En una entrevista concedida a RNE, Gabriel Rufián ha sopesado la posibilidad de una nueva cita con las urnas ante la cerrazón del partido morado. El diputado de Esquerra Republicana no considera una deriva correcta la que ha tomado Pablo Iglesias, en la que advierte a Sánchez de que si no entran en el Gobierno habrá nuevas elecciones.

Rufián sostiene que esta vía supondría una “nueva oportunidad para que el fascismo pueda gobernar”. Asimismo, asegura que a “ningún demócrata” quiere que “el fascismo” tenga el poder en su país. No obstante, ha advertido de que “no le vamos a dar un cheque en blanco a Pedro Sánchez” a pesar de su oposición a las derechas.

Sobre esta situación de bloqueo, el republicano ha asegurado que “nosotros ya escarmentamos” por lo ocurrido en 2015. “Estos arranques que tiene Podemos a veces” no los comprende el diputado independentista, quien reconoce que vivió el nacimiento del partido morado con “simpatía”. Califica como “imprudente” que en el partido digan que han cosechado malos resultados, pero su línea roja sea “entrar en el gobierno” sea como sea.

La investidura de Sánchez

El diputado republicano ha puesto las cartas sobre la mesa y ha deseado que Sánchez descuelgue el teléfono para llamarle. “Formaría parte de la más absoluta normalidad”, afirma Rufián. Considera lógico que “el partido que ganó las elecciones en España llamase al que las ganó en Cataluña”.

Sin embargo, el optimismo ha brillado por su ausencia en las palabras de Gabriel Rufián, pues se ha mostrado su recelo al respecto. “No confío en la valentía del PSOE”, reconoce. Asimismo, asegura que la investidura podría ser en la primera o segunda semana de julio porque así “suena por los pasillos” de la Cámara Baja. No obstante, ha indicado que también suena que Sánchez “no tiene ninguna prisa”.

Diálogo sin cortapisas

Preguntado por la influencia que el juicio del procés ejerce sobre las relaciones entre PSOE y ERC, Rufián admite que no hay cambio en “nuestras relaciones hasta la sentencia”. “Está descrita y decidida”, sostiene con tristeza el dirigente republicano. “Es dramático para cualquier demócrata que esto pase”, añade.

Lamenta que las penas para “nuestros compañeros en el exilio y en las cárceles” sean durísimas como se comenta. “Esto se soluciona con diálogo”, insiste Gabriel Rufián. Asimismo, asegura que “nosotros no vamos a desaparecer” por lo que dicte el Supremo y ha invitado al PSOE ha hacer una reflexión al respecto.

“No se soluciona con sentencias ni con amenazas”, continúa el líder independentista. En este sentido, ha abogado por “recuperar los días en los que se dialogaba” y ha valorado de forma “positiva” el documento que generó la reunión de Pedralbes entre Quim Torra y Pedro Sánchez.

Muestra su predisposición a la creación de mesas de diálogo en las que sienten miembros de todas las formaciones políticas. “Me encantaría ver a Arrimadas y a Álvarez de Toledo en una de ellas”, reconoce Rufián, quien, a su vez, solicita alguna propuesta diferente a las “maquinarias de represión”.

No nos parece una herejía el documento de Pedralbes”, reitera mientras alude a los titulares que vertían ciertos medios al respecto. Se trataba de “dos gobiernos que reconocen que hay un conflicto político que hay que solucionar con política”, asegura.

El enigma de Barcelona

El republicano también se ha pronunciado sobre el mar de dudas en el que navega el futuro consistorio barcelonés. Preguntado sobre un posible gobierno de Ada Colau con el apoyo incondicional de Manuel Valls, ha destacado que habría que preguntarle a la alcaldesa, a la que se ha referido como una “gran activista”, si aceptaría los votos de un “tipo” que deportó a 10.000 personas en Francia.

“Parece que Ada Colau ganó las elecciones y que nosotros intentamos usurpar su trono de Hierro”, asegura. Sin embargo, “nosotros ganamos” y pide la conformación de un gobierno de izquierdas porque “nosotros somos de izquierdas y estaremos a favor de cualquier iniciativa social” en cualquier lugar.