El líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, se estrena este martes en el Senado, donde buscará posicionarse como la “alternativa” real al actual Gobierno de PSOE y Unidas Podemos. El gallego centrará el tiro en el aspecto económico, optando por un tono “cordial” frente a las “descalificaciones” y la “crispación” que, según su entorno, personifica el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez.
Será el primer duelo parlamentario entre Sánchez y Feijóo, dos meses después de que fuera elegido presidente del PP en el congreso extraordinario celebrado en Sevilla que puso fin al liderazgo de Pablo Casado y cuando se cumplen dos semanas de la toma de posesión de su escaño en el Senado.
La secretaria general del PP, Cuca Gamarra, ha vaticinado que "será un debate interesante" en el que los españoles podrán comprobar las diferencias de "fondo y de forma" entre el modelo de Sánchez, de "la incompetencia, crispación y falta de credibilidad" frente al modelo de Feijóo de "estabilidad, crecimiento y empleos".
Prioridad a la economía
Feijóo ha optado por el tema económico para su estreno para dejar claro que el PP está con los asuntos que preocupan a los ciudadanos frente a los temas con los que busca "distraer" el Gobierno, según destacan en Génova. Así, Gamarra ha subrayado que lo que quiere el PP es que "se hable de la España real" y "de los problemas que tienen los españoles".
"¿Considera el presidente del Gobierno que su Ejecutivo está a la altura de las necesidades de las familias españolas?", reza textualmente en la pregunta que Feijóo registró en la Cámara Alta y que pretende formular a Sánchez en el Pleno.
Después de que la inflación haya vuelto a repuntar en mayo hasta el 8,7% por la subida de carburantes y alimentación, los 'populares' consideran que las recetas del Gobierno de Sánchez no están "funcionando" y le ofrecen aplicar las incluidas en el plan económico que Feijóo remitió a Moncloa hace un mes.
De hecho, el PP ya ha advertido que no apoyará la prórroga hasta octubre del plan anticrisis que el Consejo de Ministros aprobará este mes si no se atienden algunas de las propuestas que ha puesto encima de la mesa en su documento económico y que, a su entender, hasta ahora el Gobierno ha "ignorado" y "despreciado".
Ese plan se estructura en cuatro bloques: bajada selectiva de impuestos a rentas bajas y medias a través de la deflactación de la tarifa, reducción del gasto político superfluo, eficiencia de la burocratización reduciendo ministerios y agilización en la ejecución de fondos. "Sánchez tiene en la bandeja de entrada, a un clic, un plan de país, sin logos que representa la oportunidad de mejorar la situación de los ciudadanos", dijo esta semana el responsable de Economía del PP, Juan Bravo.
"Cortesía" frente a "crispación"
De la misma manera, y después de que Sánchez haya optado por el ataque al PP resucitando casos de corrupción y tildándoles de "mangantes", el equipo de Feijóo anticipa que optará por un tono educado, evitando la crispación y la descalificación.
Así lo ha confirmado públicamente este lunes en rueda de prensa la secretaria general del PP, quien ha señalado que se podrá visualizar la "cortesía y buenas formas" que mantendrá Feijóo en el Senado frente al modelo de "crispación de Sánchez".
De hecho, Gamarra ha censurado los "insultos" de Manuel Pezzi, presidente del PSOE andaluz, a Feijóo -le tildó de "tontopollas" por comparar el atardecer de Granada con el de Fisterra- y ha señalado que la falta de una disculpa por parte de la dirección del PSOE evidencia que avala estas faltas de respeto que denotan "la debilidad, los nervios y la desesperación del PSOE" en la campaña andaluza. "Para el PP es tan importante el fondo como las formas; esto tendrá, sin duda, su respuesta en las urnas", ha avisado.
En la cúpula del PP creen que el presidente del Gobierno parte con ventaja al poner el broche final en las sesiones de control del Parlamento. El propio Feijóo ha reconocido públicamente que si Sánchez se prepara "bien" sus intervenciones puede ganarlas porque "las cierra" al tener el último turno de palabra.
