El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha venido a confirmar este martes que la actual secretaria general del partido y portavoz en el Congreso de los Diputados, Cuca Gamarra, va a dejar uno de los dos cargos en el marco de esa reestructuración que se plantea en Génova. Concretamente, el gallego ha sentenciado que va a haber transformaciones "en la portavocía” y que la secretaria general “no puede ser secretaria y portavoz” a la vez, lo que viene a confirmar algo que desde hace un tiempo es un secreto a voces: Gamarra dejará de dar la batalla en la Cámara Alta.

Ahora queda la incógnita de en qué momento informará el líder de la oposición de los cambios. Dice que trasladará los cambios “en breve”, pero ese tiempo puede ser “dentro de unas horas” o unos días, nunca después de noviembre.

Posibles relevos de Gamarra

Entre los nombres que suenan para sustituir a Gamarra se encuentran Esteban González Pons, quien fuera portavoz parlamentario en el Senado con José María Aznar, aunque tampoco se descarta la posibilidad de que el peso de la voz recaiga sobre el actual vicesecretario de Cultura y Sociedad Abierta, Borja Sémper, e incluso la lógica apuntaría a Miguel Tellado, quien se ha postulado como baluarte de la derecha contra el Gobierno, traspasando a veces líneas rojas para ello.

Críticas infundadas a los ministerios, condonación de deuda, dudas de la Justicia…

El responsable del PP se ha referido a otras cuestiones al margen de las puramente internas durante una entrevista con Susanna Griso. La más inmediata dentro de la actualidad es la que tiene que ver con la composición del nuevo Gobierno. Aquí, Feijóo ha vuelto a criticar que el ministerio de Presidencia “asuma también las competencias en materia de Justicia”. Sin embargo esto, que considera una “politización máxima” por parte del Gobierno en general y del departamento de Félix Bolaños en concreto, es algo que el PP lleva a cabo en la Comunidad de Madrid, Galicia, Canarias y Cantabria.

Mientras hablaba de esta cuestión, el líder del PP ha insistido en que Bolaños, el “notario mayor del reino”, nos “ha mentido en todo momento” y ha asegurado que su formación “quiere la renovación del CGPJ”, pero como les dice Europa. “Si lo que se pretende es independencia, se llevará a cabo”, ha destacado después de que sea su partido el que se empeña en bloquear esta cuestión.

También ha apuntado a otros nombres concretos dentro de los ministerios, como el de Óscar Puente, actual responsable de Transportes: “No creo que sea mi azote, sino un azote a la inteligencia”. En estas, Feijóo ‘salva’ al exalcalde de Barcelona, Jordi Hereu, a quien califica de “esperanza” y condena otros nombramientos como el de Mónica García al frente de Sanidad: “¿Cómo se puede tomar en serio la política sanitaria si esta es la sexta ministra?”. Así las cosas, Feijóo ha expuesto que su partido tendría “trece o catorce ministros”.

A la pregunta de si uno de estos, el de Industria, estaría ocupado por el PNV como dejó entrever el portavoz vasco, Aitor Esteban, que se negoció previa investidura, el responsable popular resuelve que “entre uno de Sumar o del PNV” sería mejor el primero, pero que esta conversación no se dio. Precisamente la “educación” que asume mantener con Esteban le ha llevado a defender a la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, después de llamar “hijo de puta” a Sánchez: “Es lamentable que el presidente hiciese una crítica demoledora a los presidentes autonómicos, que estaban en la tribuna y no se pueden manifestar. Y cuando el insulto afecta a tu familia, creo que es impropio de un candidato”.

Respecto de esa batalla legal que promete el PP, Feijóo no ha dudado en levantar sospechas sobre el Tribunal Constitucional. De este modo, ha emitido que “es el TC con más sospechas de los últimos 45 años” y ha querido marcar diferencias con el tono de otros sobre la Justicia que tanto critica: “El independentismo habla de la totalidad de los jueces, magistrados… Es un atentado contra el Estado. Hay una diferencia entre la jurisdicción ordinaria (Tribunal Supremo) y el TC”.

En otro orden de cosas, Feijóo reconoce que Junts les planteó lo mismo que al PSOE durante las conversaciones, aunque no ha llegado a decir se les solicitaron o no un referéndum de autodeterminación, asumiendo que es un “concepto incompatible” con la Constitución, y apuntalando que la amnistía “dificultó cualquier acuerdo”. “No seguimos hablando con Junts, porque no puedo ser presidente a costa de incumplir la Carta Magna y engañar a los electores. No es solo el aspecto jurídico, sino también ético y moral. Es una cacicada extrema. En este país ha sido condenada la Familia Real (en referencia a Iñaki Urdangarín) y resulta que un conjunto de políticos para hacer a Sánchez presidente va a quedar exonerado e la prevaricación, la malversación, la corrupción y de declarar la independencia de nuestro país”.

Otro punto sobre el que tampoco se ha mojado el gallego es la condonación de deuda. Concretamente, no ha respondido si los barones del PP de zonas como Murcia, Andalucía o Valencia se sujetarían o no a la media contemplada en el acuerdo de Gobierno. Tres veces le ha preguntado Grisso, hasta que por fin ha dicho: “Si fuera presidente autonómico le respondo. No tiene ningún sentido que el que peor gestione le condonen las deudas. A partir de ahí, veremos lo que propone”.

Por último, el gallego ha aclarado cuál fue la conversación que mantuvo con Sánchez después de que éste sacara adelante su investidura y ha hablado sobre las elecciones argentinas, dictando que en nuestro país “Perón sería Sánchez y Eva (Perón) Yolanda Díaz”. “Le dije a Sánchez: esto es una gran equivocación. Ojalá me equivoque”, ha dictado sobre lo primero.