Como era previsible, tanto el presidente del Gobierno de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, como quien fuera su consejero, y ahora alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, han salido en tromba este miércoles a reclamar la dimisión de Pedro Sánchez, entonando una variación del “España se rompe” (por culpa de Sánchez) con el “España se deshilacha” (por culpa de Sánchez).
Ambos dirigentes del Partido Popular subrayan las tesis de sus homólogos en Madrid, eludiendo pronunciarse sobre la denuncia de Manos Limpias ni sobre la responsabilidad del PP en la escalada de acoso y agresividad en la vida política, y, al tiempo, acusando a Sánchez de “cogerse cuatro días” para reflexionar “en el cuarto oscuro”.
Cuatro (o cinco) “días libres”
“En España necesitamos un presidente que gobierne, actúe con responsabilidad y no se coja ‘cuatro días libres’ para pensar lo que tiene que hacer cuando está agobiado por la corrupción”, dice Mañueco, prejuzgando el mañana, y añade que “el tiempo de Sánchez se ha agotado. No puede esconder la cabeza cuando las cosas van mal. El daño reputacional que se ha hecho a nuestro país es gravísimo”.
Sin quedarse atrás, preguntado sobre el asunto, el ahora alcalde de Valladolid ha acuñado el término “España se deshilacha”, su versión del “España se rompe” sobre la decisión de Pedro Sánchez de reflexionar sobre si mantenerse en la Presidencia del Gobierno soportando los ataques político-mediáticos a su persona y ahora, especialmente, a su pareja, Begoña Gómez, merece la pena.
“Es inaudito que un presidente del Gobierno ‘se tome cinco días para reflexionar’, que se supone que se va a meter en el cuarto oscuro a pensar; yo tengo claro que, adopte la decisión que adopte, el señor Sánchez debe de dejar de estar en que España se deshilache, esa es la idea en la que debe de reflexionar estos días, pero que deje de deshilachar a este gran país”, ha insistido Carnero.
Dónde vas... manzanas traigo
Carnero, alcalde y senador a tiempo parcial, afirma que “España y los españoles no se merecen este momento; luchamos y trabajamos mucho durante la Transición por la Constitución Española y ese es el marco en el que nos debemos de mover”.
Pero vienen las preguntas: “¿Cree usted que se ha traspasado una línea roja metiendo en este ambiente de tensión política en el país a la mujer del presidente?”; “¿”Tiene el PP alguna responsabilidad en este clima de tensión política que se vive?”, cuestiona un veterano periodista.
Sobre la segunda pregunta, responde Carnero, “Nosotros somos un partido en la oposición y tenemos que ejercer esa oposición como la estamos ejerciendo, con lealtad y defendiendo los intereses de este país, España, que es lo importante, y los españoles, y estamos ejerciendo la labor que nos corresponde como oposición”.
Sobre la primera pregunta, el actual alcalde de Valladolid no sólo renuncia a valorar la actuación de los tribunales, sino que tampoco se pronuncia sobre lo que se le ha preguntado, es decir, sobre si se ha traspasado una línea roja en el ambiente de tensión política en relación a la mujer del presidente: “Si se ha traspasado, o no, por hechos u omisiones realizados, o no realizados, por la señora esposa del presidente del Gobierno de España, eso no me corresponde a mí dilucidarlo”.
“Lo que sí le digo es que España se está deshilachando y a mí eso no me gusta como español”, concluye.
Todo claro.
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