El Partido Popular se vuelve más dependiente que nunca de la extrema derecha, según apunta Electomanía en su último Electopanel, con fecha a 24 de agosto. La firma, especializada en encuestas, dota de 130 escaños a los de Alberto Núñez Feijóo si las elecciones generales se celebraran mañana mismo, lo que implica una necesidad directa de coalición con el partido de Santiago Abascal para alcanzar los 176 parlamentarios que auparían al gallego a La Moncloa. En este sentido, las encuesta da 63 escaños a Vox, lo que supone un ligero ascenso de la formación ultraderechista, pero imprescindible para las aspiraciones de Feijóo.
En el lado contrario del tablero, mientras que el PP pierde apoyos, el PSOE mejora hasta llegar a los 102 escaños. A la izquierda de los socialistas, el actual partido que integra el Ejecutivo de coalición, Sumar, se quedaría en los 11 diputados; y Podemos, en los 10.
Otro aspecto que destaca Electomanía es la irrupción de Unión del Pueblo Leonés (UPL), con un escaño. Entretanto, los partidos independentistas se repartirían de la siguiente manera sus escaños: Junts lograría 8 diputados, uno más que Esquerra Republicana (ERC). Dentro del País Vasco, EH Bildu obtendría 7 parlamentarios, por los 6 del PNV. Ya mirando a Galicia, el BNG se quedaría en los 3.
Si se atiende al porcentaje de voto, el PP alcanzaría un 30,3% de éste, seguido del PSOE (25,5%), Vox (17,7%), Sumar (6,7%), Podemos (6,4%), Junts (1,8%), Se Acabó la Fiesta (SALF); el partido de Alvise Pérez (1,8% pero sin representación parlamentaria), ERC (1,6%), EH Bildu (1,4%), PNV (1,3%), Pacma (1% y también sin representación parlamentaria), BNG (con el mismo porcentaje), Coalición Canaria (0,5%), Unión del Pueblo Navarro (0,2%).
Atendiendo a estos números, los populares bajarían en siete diputados su presencia actual en la Cámara Baja, si bien en esta ocasión sí que les darían los números para liderar el país como formación principal, pero tendrían que hacerlo inevitablemente de la mano de Vox. La extrema derecha obtendría un resultado histórico en nuestro país si se atiende a la representación actual de la que disfruta en el hemiciclo, donde cuenta con 33 señorías.
Lejos de las promesas estivales
Con los números encima de la mesa, parece más evidente que nunca que el PP no podría cumplir con su compromiso de verano con el que el Feijóo prometía formar un Gobierno en solitario en el supuesto de lograr la mayoría suficiente en las urnas. Esta era la promesa que el gallego deslizaba a principios de julio, aunque en la práctica le época estival ha estado marcada por el seguidismo para con la extrema derecha, un escenario que se ha visto de manera muy clara en escenarios como el episodio de Torre Pacheco (Murcia), o los incendios forestales que han quemado el país.
Aquella aclaración, que cada vez carece más de sentido, indicaba el “compromiso” del líder gallego para capitanear el país sin la formación de Abascal. No habrá un Gobierno de coalición”, emplazaba el entonces nuevo número dos de Génova, Miguel Tellado. Si bien, los ‘populares’ no negaron en ningún momento la posibilidad de alcanzar acuerdos con la formación ultra como puedan ser pactos de investidura o legislatura con Vox, sobre quien siempre ha dejado claro que no hará un cordón sanitario.
La historia podría repetirse
Las palabras del PP son poco creíbles. Basta con atender a la práctica, y es que ya antes de las elecciones municipales y autonómicas de 2022, los conservadores decían que querían gobernar en solitario, pero esto no pasó. Lejos de ello, y tras exigirlo la extrema derecha como condición, acabó formando hasta cinco gobiernos de coalición autonómicos, así como decenas de los mismos en consistorios.
Sin embargo, los ultras rompieron estos Ejecutivos de manera unilateral en julio de 2024, y desde entonces, a cambio de exigencias, la derecha tradicional ha aprobado sus Presupuestos en algunas autonomías, no así en otras.