La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha entrado este martes en el cuerpo a cuerpo con su homóloga en Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, después de que la segunda afirmara el pasado viernes que la influencia del “socio minoritario” del Gobierno de Coalición había sido “muy pequeña, por no decir ninguna”.

La responsable de Sumar ha respondido tajante cuando la conductora del programa, Ángels Baceló, le ha puesto el corte de las declaraciones. “Decía mi madre: dime de lo que presumes y te diré de lo que careces”, ha contestado. "Venía para acá y me he encontrado con una mujer que me ha parado. La gente sabe dónde se han defendido los ERTE, quién ha hecho la reforma laboral que ha cambiado el paradigma del mercado de trabajo en España y que hoy permite que tengamos 14,3 millones de personas asalariadas indefinidas en nuestro país, que hemos atajado con este mal que nos decía incluso alguna vicepresidenta económica que "no se pueden cambiar cosas porque el modelo productivo español en fin", ha comenzado enumerando varios de los puntos de su gestión, para continuar refiriéndose al la ley rider o la subida del salario mínimo

A por el 'control' económico

Calviño y Díaz tratan de hacerse con el bastón de mando de los asuntos económicos. En el día de hoy, la responsable de Trabajo ha respondido a la parte socialista, quien hace unos días afirmaba que Unidas Podemos “prácticamente no había tenido influencia” en el aspecto económico dentro del Ejecutivo de coalición.

En una comparecencia desde la sede del PSOE en la calle Ferraz, Calviño sacaba pecho, eso sí, de la estabilidad política de la que a su juicio goza España y señalaba que el balance de estos años del Gobierno ha sido "muy positivo". A renglón seguido, apuntaba que "el socio minoritario no ha tenido prácticamente influencia en la política económica".

En otro orden de cosas, al ser cuestionada sobre si se sentiría cómoda si, en caso de que el presidente del Ejecutuvo vuelva a La Moncloa, se apoyase en los mismos socios de Gobierno y parlamentarios, en referencia a Unidas Podemos, ERC y Bildu; contestaba que todos ellos han hecho un gran esfuerzo para garantizar la estabilidad política en medio de turbulencias provocadas por la pandemia y por la guerra de Ucrania, entre otras problemáticas.

Entretanto, ensalzaba los elogios de Europa por, precisamente, una cuestión que choca frontalmente con el auge de la ultraderecha en el marco del continente y, por qué no subrayarlo, también ahora en España con pactos como el de Castilla y León o la Comunidad Valenciana.

Consolidar las reformas

Justo frente a todo ello, Calviño incidía en la necesidad de consolidar las reformas que se han llevado a cabo en el seno del Ejecutivo para “no volver atrás” en derechos mientras instaba al PP a dejar claro “cuanto antes” cuáles eran las medidas que quiere tomar en este sentido y si Feijóo apoyaría, en caso de necesitarlo, su política en Vox.

En el ámbito directamente económico advirtió que “con las cosas del comer no se juega” y pedía al líder gallego si tenía pensado congelar las pensiones, la subida de los salarios o derogar la reforma laboral. En las mismas declaraciones, lamentó que el pasado 28 de mayo la derecha centró el debate público en temas “que nada tienen que ver con la política económica” porque no quiere hablar de los buenos datos de empleo o de que España tiene unas de las inflaciones “más bajas” de Europa.