El Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) ha publicado un nuevo barómetro, correspondiente al mes de octubre, cuyo trabajo de campo arrancó días después de que el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, fracasara en su investidura. Coindició también con la apertura por parte del rey Felipe VI de una nueva ronda de consultas con los grupos que concluyó con la designación de Pedro Sánchez como candidato. En este nuevo sondeo, el Partido Socialista no consigue mantener la ventaja de dos puntos sobre los conservadores, que se recuperan hasta quedarse a tan sólo cuatro décimas. Por su parte, Vox continúa con su caída libre, hundiéndose como cuarta fuerza política al perder un punto con respecto al mes de septiembre. Sumar estrecha sus diferencias con la ultraderecha al experimentar una notoria subida.

De celebrarse las elecciones hoy, el Partido Socialista obtendría la victoria, aunque lo haría por la mínima. El barómetro del mes de octubre reduce la ventaja entre los dos principales partidos del arco parlamentario, después de aventajar al PP por dos puntos en el estudio de septiembre. De este modo, la formación que lidera el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, retrocedería en apoyos, pasando de aglutinar el 33,5% de los sufragios a un 32,6. Una caída que los conservadores habrían aprovechado después de alejarse en el anterior sondeo, que coincidió con el fracaso de Alberto Núñez Feijóo en el debate de su investidura. 

No obstante, los populares se recuperan del turbulento mes de septiembre, aunque su subida es de medio punto. La caída de los socialistas beneficia a un Partido Popular que pasa la barrera del 32%, hasta situarse a menos de cuatro décimas del ticket que encabeza Pedro Sánchez. Las dos fuerzas políticas del bipartidismo se aprietan en la misma cifra, pero el escenario para la derecha no es tan halagüeño, pues la tendencia decreciente de Vox provoca que las derechas continúen ancladas en el aislamiento. De este modo, se mantiene la hegemonía del bloque progresista

Sumar no se baja del tercer escalafón; una tendencia que recoge la práctica totalidad de la oferta demoscópica. La plataforma que encabeza la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, no materializó este reto en las pasadas elecciones generales celebradas en el mes de julio. Sin embargo, desde entonces, la propensión de la marca progresista se mantiene al alza. La amalgama de formaciones de izquierdas obtiene un impulso que le catapulta hasta el 12,7% de los sufragios, en caso de que las elecciones se celebraran hoy. Un incremento que aprovechan, a su vez, para ampliar la ventaja con respecto a sus perseguidores, que se alejan mientras encadenan crisis. 

No son buenos tiempos para la ultraderecha. El crecimiento del Partido Popular no explica el hundimiento de Vox. Los de Santiago Abascal pierden más que las ganancias que le reporta el estudio a los conservadores. Los socios habituales de Génova retroceden un punto porcentual, pasando de los 11,1 a los 10,1 y a coquetear con bajar de la frontera de las dos cifras. Una situación que se suma a las constantes polémicas en las que se ha visto envuelta la formación desde el pasado 23J, donde ha encadenado dimisiones en clave orgánica y rupturas en Gobiernos municipales. 

Saliendo de las batallas entre los cuatro principales partidos, el independentismo catalán y vasco pugna con la vista puesta en unos comicios autonómicos que se vislumbran ya en el horizonte. En el apartado de Cataluña, Esquerra Republicana de Cataluña (ERC) amplía sus diferencias con Junts. Los neoconvergentes pierden fuelle después de que el 23J lograran equiparar fuerzas con sus adversarios a la izquierda. Los republicanos rozan los dos puntos, mientras que la fuerza que aún dirige Carles Puigdemont adelgaza hasta el 1,3%. Por otro lado, EH Bildu le gana la partida al Partido Nacionalista Vasco, aunque por la mínima. Los abertzales se sitúan tan sólo una décima por delante de los jeltzales.

Sánchez, el mejor valorado

El presidente del Gobierno, Pero Sánchez, también se hace con la victoria en términos de valoración de líderes. También por la mínima. El dirigente socialista es el más valorado por los electores, aunque reduce su puntuación. La caída provoca que se estrechen las diferencias con Alberto Núñez Feijóo y Yolanda Díaz. Al jefe del Ejecutivo (4,51), le suceden la líder de Sumar y el presidente del Partido Popular; cuyas notas se detienen en el 4,49 y el 4,48 respectivamente. Sin embargo, lejos de estos guarismos y al fondo de la clasificación aparece el máximo responsable de Vox. Santiago Abascal continúa en los 2 puntos, siendo el peor valorado por la ciudadanía.