La elección de Carlos Iturgaiz como candidato a lehendakari por parte de la coalición de PP y Ciudadanos en el País Vasco es una clara intención de ambas formaciones de girar a la derecha el discurso para el territorio. La figura de Iturgaiz representa el sector más conservador de la derecha española y eso es algo que, lógicamente, gusta a la ultraderecha.

La relación de Iturgaiz con Abascal viene de la época en la que el popular era presidente del PP vasco, mientras que el fundador de Vox ocupaba el liderazgo de las Nuevas Generaciones del PP. De hecho, el propio Iturgaiz elogió el pasado lunes a Abascal y pidió "aunar fuerzas" con Vox, señalando que "Santiago es un hombre estupendo, una magnífica persona". Asimismo, el hombre de Casado en el País Vasco aseguró que no están juntos es porque ellos "no quieren".

Los elogios han sido mutuos. En declaraciones a Federico Jiménez Losantos, Abascal confirmó el “gran afecto” que siente por Iturgaiz y reflejó que “sólo tiene un problema y es que está en el PP”. Por otra parte, el secretario general de Vox, Javier Ortega Smith, afirmó que que a Iturgaiz "le encantaría poder defender desde el PP las ideas de Vox". Esta serie de halagos no son exclusivos de los líderes de extrema derecha sino que también son secundados por sus votantes. Así lo ha publicado Electomanía en una encuesta que asegura que a quienes más les ha gustado el cambio Alonso-Iturgaiz es a los votantes de Vox.

Según la muestra, la figura de Iturgaiz como candidato a lehendakari cuenta con el apoyo del 78,4% de los votantes de Vox. Por encima incluso de los de PP (75,9) y Cs (59,2). 
Además, el 37,3% de ellos ve la elección excelente.