Isabel Díaz Ayuso y José María Aznar han sido los protagonistas del la sesión extraordinaria del Aula de Liderazgo del Instituto Atlántico de Gobierno y la Universidad Francisco de Vitoria. Las discrepancias entre Génova y la Puerta del Sol han trascendido las paredes del auditorio y han provocado que el expresidente del Gobierno se pronuncie al respecto, destacando a la jefa del Ejecutivo regional por encima del líder de la oposición.

Aznar se felicitaba porque, “afortunadamente para Madrid y para el resto de España”, han emergido en los último años una “generación de personas con unas condiciones importantes de liderazgo”. El ex jefe del Ejecutivo detenía su discurso para indicar que a su lado “tenemos a una de ellas”, Isabel Díaz Ayuso.

Lo ha demostrado en su gestión de Gobierno y en su capacidad política”, ha continuado Aznar, quien ha señalado que, probablemente, sea la figura “más relevante” en estos momentos, por encima de Pablo Casado. Sin embargo, el expresidente del Gobierno ha tenido después un gesto para el que fuera su pupilo y ha destacado, también, su talento para la política. “Tiene todas las condiciones para ejercer un liderazgo brillante y espero y deseo que lo haga”, ha destacado.

Vicente Vallés, que ejercía de maestro de ceremonias del Aula, preguntaba a José María Aznar sobre si para Pablo Casado puede ser gratificante que su liderazgo quede ensombrecido por Ayuso. “Todo liderazgo inteligente se rodea de los mejores y Pablo [Casado] lo es”, ha apostillado el expresidente del Gobierno, quien ha presumido de su capacidad para conformar equipos y ha indicado que Ayuso se asemeja a él en este aspecto.

Aznar recordaba una anécdota cuando era el inquilino de La Moncloa. Había periodistas que le “mortificaban” cuando se rodeaba de personas “más inteligentes” que él y ha asegurado que es todo lo contrario. Justifica su razonamiento en que “crear buenos equipos” es crucial para el “ejercicio de liderazgo”. “No tiene que molestar a nadie”, ha apostillado.

Desligándose de los liderazgos, Aznar ha puesto de relieve la victoria de Ayuso en las elecciones del 4 de mayo. Entiende el expresidente que este triunfo ha abierto la vía a una “alternativa de Gobierno” y a que los “españoles respalden un proyecto político basado en la libertad ampliamente”. Ha puntualizado que la presidenta regional “ha marcado un camino” y es el que la derecha – el Partido Popular – tiene que seguir. “Para Casado es una gran ventaja”, ha abundado.

Ayuso echa balones fuera

La presidenta regional ha preferido repeler este asunto justificando que existe un “interés” en ensombrecer a Pablo Casado. “A mí se me ha puesto en portadas delante de él cuando los dos hemos dicho lo mismo”, ha lamentado la jefa del Ejecutivo madrileño, quien ha argumentado que es el propio Casado y no ella quien “gobernará España en un futuro”.

Ayuso se ha sacudido los elogios de encima, aunque no ha dudado en sacar pecho de la gestión de su Gobierno durante la pandemia. “Tengo la obligación de defender los intereses de España en Madrid”, ha indicado la presidenta regional, quien ha sacado a colación los indultos a los nueve condenados por el procés. “Cuando intentan subir los impuestos en Madrid para pagar la corruptela independentista, tengo que hablar. No puedo callarme porque es mi responsabilidad”, ha deslizado.

Reconduciendo el discurso hacia la relevancia de su figura política, Ayuso ha aseverado que no permitirá que “me enfrenten” con una persona con la que “llevo 17 años trabajando”. “Se equivocan si piensan que me voy a quedar callada”, ha zanjado.