El expresidente del Gobierno español y presidente de la Fundación FAES, José María Aznar. EFE/Archivo



El expresidente del Gobierno José María Aznar ha pedido a la Internacional Demócrata de Centro (IDC) que auspicie una investigación "por la vía más adecuada y sin los condicionamientos del procedimiento oficial seguido en Cuba" de la muerte de los opositores cubanos Oswaldo Payá y Harold Cepero. Aznar, presidente de FAES, ha hecho esta petición en una carta enviada al presidente de la IDC, Pier Ferdinando Casini, y a los miembros del Comité Ejecutivo de esta organización (que aglutina a partidos de centro-derecha de todo el mundo) para que, en la reunión que mantienen en Budapest, analicen la posibilidad de pedir esa investigación "para que se esclarezcan de manera satisfactoria las circunstancias" de la muerte de Payá y Cepeda, que murieron en un accidente de tráfico en Cuba cuando viajaban en un vehículo conducido por el español Ángel Carromero.

Aznar explica en su carta que esa investigación no es sólo "una legítima exigencia de las familias, sino también un imperativo moral y político" para todos los que quieren promover la causa de la libertad en Cuba con la solidaridad hacia sus demócratas.

Su postura contrasta, una vez más, con la de Rajoy y su Gobierno, que ha aceptado la versión de las autoridades cubanas y ha evitado seguirle el juego a los sectores más reaccionarios del PP que hablan de una conspiración para asesinar al dirigente opositor. Entre los partidarios de esta teoría están Esperanza Aguirre, el propio Ángel Carromero y la familia de Payá, que ha criticado duramente al Gobierno por aceptar la versión de las autoridades cubanas del accidente de tráfico. "Es sorprendente que estén dando crédito a la justicia cubana como si fuera un estado de derecho. Carromero es una víctima más de todo este proceso. Me sorprende que a su llegada a este país sea tratado como un delincuente", dijo el pasado mes de septiembre Rosa María Payá, hija de Oswaldo Payá, en una entrevista en TVE.