La grave crisis del coronavirus, que acumula más de 20.000 contagiados en España y cerca de 1.500 muertes, ha provocado que durante un par de semanas todo el país, con sus diferencias, reme en la misma dirección para intentar salir de esta situación crítica cuanto antes. Todos menos la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el presidente de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra, ambos señalados por los recortes en Sanidad y que han optado por hacer oposición al Gobierno de España.

Este último cruzaba en estas últimas horas todos los límites al acusar en la BBC al Ejecutivo liderado por Pedro Sánchez de impedir confinar a la ciudadanía de Cataluña en sus domicilios. “Nuestras competencias fueron centralizadas y ahora tenemos menos para ayudar a nuestra gente”, aseguraba el president, deslizando en su entrevista que en Cataluña no ha entrado en vigor el estado de alarma y no ha sido posible aplicar el confinamiento.

“El coronavirus solo se puede detener si realmente cerramos y confiamos en casa a toda la población”, añadía el dirigente catalán.

Asimismo, Torra tampoco quiso firmar la semana pasada el comunicado conjunto en el que todos los presidentes autonómicos y el propio Sánchez se comprometían a trabajar con lealtad y coordinados.

Por su parte, la presidenta de la Comunidad de Madrid (zona más afectada por el coronavirus) atacaba este sábado a Sánchez acusando al jefe del Ejecutivo de señalar a esta región “como la apestada en su mitin televisivo”.

“Sánchez no ha dicho ni propuesto absolutamente nada que no se esté haciendo en Madrid. Así que no acepto que la señale como la apestada en su mitin televisivo”, escribía Ayuso en su cuenta de Twitter.