Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, sigue siendo propietaria de una empresa que desde 2014 no cumple con la obligación legal de presentar sus cuentas anuales al Registro Mercantil. Se trata de Sismédica SL, una sociedad limitada que se dedica al alquiler de bienes inmobiliarios y de la cual posee el 50% junto a su hermano, Tomás Díaz Ayuso.
Concretamente, tal y como ha podido comprobar ElPlural.com, el objeto social que figura en el registro mercantil especifica que Sismédica se dedica de forma prioritaria al sector inmobiliario, aunque se incluye que también realiza labores como “la compraventa, importación, exportación” y distribución de “productos de electromedicina” y “en general de materiales y productos de carácter científico”.
La existencia de esta empresa ha sido omitida por la dirigente popular en sus declaraciones de bienes ante la Asamblea de Madrid, tanto en la inicial de 2019 como en la que se publicó en junio de 2023 al cierre de la legislatura. Este hecho constituye una infracción del Reglamento del Parlamento autonómico, que exige a los diputados declarar sus participaciones en sociedades mercantiles.
Ayuso rectificó su declaración de bienes en junio de 2023, luego de que la información fuera revelada por el medio digital 'Infolibre'. Sin embargo, en dicho ajuste, la presidenta madrileña simplemente se limitó a añadir el nombre de Sismédica SL en el apartado de "Vínculos Societarios", sin explicar la omisión previa ni por qué la empresa sigue activa a pesar de haber afirmado en 2019 que estaba en proceso de liquidación.
En todo este tiempo, Ayuso tampoco ha justificado por qué aceptó la donación del 50% de las participaciones de Sismédica SL por parte de su padre en 2012, cuando este tenía deudas con Hacienda y la Seguridad Social por más de un millón de euros, situación que podría constituir un delito de alzamiento de bienes, según diferentes expertos consultados.
La sociedad Sismédica SL ha sido objeto de interrogantes en las declaraciones de bienes de Ayuso, ya que no fue mencionada hasta 2021 y, aunque se corrigió en abril de ese año para incluir la denominación social, aún persiste la incógnita sobre su inactividad en el Registro desde 2014.
No es la primera vez que el nombre de Sismédica se vincula a la presidenta regional. De hecho, poco antes de ser investida en la Asamblea de Madrid, el medio citado previamente adelantó que esta firma tenía una deuda con el Ayuntamiento de Madrid por no pagar el IBI de un inmueble a nombre de la compañía. Según Infolibre, en 2019 ya existían hasta cinco notificaciones de impago fechadas entre 2013 y 2017.
“Solo tengo que decir que escarbar en cómo arruinaron a mi familia hace ocho años para atacarme hoy políticamente me parece que es un ejercicio absurdo. Es todo lo que tengo que decir”, especificó en aquel momento la presidenta. Ahora, sus portavoces, preguntados por el motivo de que la mercantil aún no haya sido disuelta, se limitan a echar balones fuera: “Lo habrán decidido así”.
Tomás Díaz Ayuso, de nuevo en la polémica
Por otra parte, Tomás Díaz Ayuso, hermano de Ayuso, ha sido el único administrador de Sismédica SL desde 2012 y estuvo envuelto en un escándalo durante la pandemia del COVID-19 debido a la venta de mascarillas a la Comunidad de Madrid a través de una empresa colaboradora, lo que le reportó un beneficio considerable. Esta operación fue denunciada y archivada por la Fiscalía.
Además, Sismédica SL está relacionada con el caso Avalmadrid, que involucra un préstamo no devuelto otorgado a MC Infortécnica, empresa en la que los padres de Ayuso tenían participación. En medio de este contexto, Sismédica SL fue donada a los hijos del padre de la dirigente madrileña, evitando así un posible embargo.
Así, desde que se conociera este hecho, la oposición ha exigido permanentemente explicaciones a Ayuso sobre su empresa y su patrimonio. Unidas Podemos presentó una denuncia en la Asamblea de Madrid por incumplimiento del Reglamento, mientras que Más Madrid solicitó su comparecencia urgente en el Parlamento regional para esclarecer sus cuentas y las de su familia. El PSOE ha criticado su conducta y ha pedido su dimisión.
No obstante, pese a la insistencia de la oposición, Ayuso ha evitado responder a las preguntas sobre este asunto y ha intentado desviar la atención hacia otros temas, lo que solo aumenta las sospechas sobre su honestidad y transparencia en relación con su empresa y su patrimonio. De hecho, cuando fue cuestionada por los periodistas sobre por qué ocultó el nombre de su empresa en su declaración de bienes, se limitó a decir: "Yo de las cosas de Podemos no hablo, gracias". También ha acusado a los medios críticos con su gestión de hacer "campaña electoral" en su contra y ha defendido su derecho a tener una vida privada.
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