"Tengo que meditar profundamente porque siento que tengo una deuda y un compromiso con los 280.000 catalanes que me votaron en las últimas elecciones". Esta ha sido la respuesta de Cayetana Álvarez de Toledo al ser preguntada sobre su futuro durante una entrevista en la Cadena COPE. 

Además de dejar la puerta entreabierta a su continuidad en el escaño, ha vuelto a atacar la línea de flotación de Pablo Casado al asegurar que "mi libertad no era compatible con su autoridad". 

La exportavoz del Partido Popular ha pasado por los micrófonos de la Cadena COPE para valorar su destitución. Cayetana Álvarez de Toledo ha recordado que ya ofreció “muchos detalles” sobre su cese, aunque “quizás a alguno no le gustó que los diera”. La aún diputada conservadora entiende que “hay que explicar los motivos” por los que uno ha sido destituida. “Es algo que siempre me ha obsesionado, el tratar a los españoles como adultos”, subraya.

Esta breve valoración dio paso a uno de sus primeros dardos contra Pablo Casado. Álvarez de Toledo afirma que el líder de los popularesconsideraba que mi manera de ejercer la libertad era incompatible con su autoridad”. Este argumento ya lo expuso la exportavoz cuando ofreció la comparecencia en los aledaños del Congreso de los Diputados.

Relacionado Arcadi Espada, pareja de Álvarez de Toledo, revela los detalles de su destitución

“Yo pienso que la libertad no es indisciplina y que mi libertad nunca fue un ataque a la autoridad de Pablo Casado”, desliza la exportavoz del Grupo Parlamentario Popular. Asimismo, recuerda que cuando el presidente de la formación la fichó, le pidió que “diera la batalla”. Para convencerla, según Álvarez de Toledo, Casado le trasladó que “ese espíritu de libertad que yo representaba” tenía que estar en la política.

Tengo que meditar profundamente porque siento que tengo una deuda y un compromiso con los 280.000 catalanes que me votaron en las últimas elecciones

En ese momento, Álvarez de Toledo advirtió a Pablo Casado sobre “las dificultades que habría”. Sin embargo, el líder del PP hizo de tripas corazón y mantuvo su perseverancia, lo cual significó “un detalle de grandeza y de creer en sí mismo” para la exportavoz.

Abierta a mantener el escaño

Cayetana Álvarez de Toledo, pese a su destitución como portavoz, está sopesando mantener su condición de diputada del Partido Popular. Afirma que tiene un “sentimiento de compromiso” con los cerca de 300.000 catalanes “que votaron por el PP en las generales”. Además, aduce que este grupo de personas vive la doble pandemia, la “nacionalista y la vírica”, por lo que considera que “merecen protección y amparo”.

Por este motivo, Álvarez de Toledo valora no renunciar al escaño a pesar de que sus relaciones en el seno de la formación conservadora han disminuido con estruendo. Asimismo, pese a los constantes misiles a la línea de flotación de Pablo Casado, ha confirmado que han vuelto a hablar “desde lo sucedido”, dado que esto “no va de amistad personal” sino de “discrepancias políticas profundas”.

Daba por hecho el ataque de la izquierda, del nacionalismo, pero no me esperaba que sucediera desde mi partido

Admite que este tipo de divergencias “hacen mella en lo personal”. No obstante, Álvarez de Toledo aboga por la separación de “lo personal con lo político” y espera que “no queden heridas” en su relación con el líder de su todavía formación, aunque es consciente de que supone un obstáculo titánico.

Relacionado Las diferencias entre Casado y Álvarez de Toledo comenzaron en enero

Asimismo relata que “los últimos meses no fueron fáciles” y reconoce que, desde los primeros instantes, “hubo personas que no sólo criticaron mi nombramiento”, sino que también “trataron de limitar mi acción política a la mínima expresión”. Álvarez de Toledo explica que esta situación “era muy difícil de soportar”.

La aún diputada del Partido Popular reconoce que no se esperaba la concatenación de ofensivas hacia su persona desde el seno de su formación. “Daba por hecho el ataque de la izquierda, del nacionalismo, pero no me esperaba que sucediera desde dentro”, aclara. Asegura que su sentir oscila entre la “liberación” y la “decepción”, aunque asegura que no se desanima.