Bruselas vuelve a ser este viernes epicentro de una negociación de calado para España. El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, se reune en la capital europea junto a su homólogo británico, David Cameron; el vicepresidente de la Comisión encargado de las relaciones con Reino Unido, Maros Sefcovic, y el ministro de Gibraltar, Fabian Picardo, para desencallar las negociaciones acerca del acuerdo del Peñón.

Pese a que es una reunión de relevancia para la política nacional y las relaciones con Reino Unido, lo cierto es que las expectativas de ambas partes están rebajadas, puesto que no se espera alcanzar un pacto en las próximas horas.

La idea, según expuso este miércoles el propio Sefcovic, que negocia en nombre de los Veintisiete líderes europeos el acuerdo que regulará la relación de Gibraltar con la UE tras el Brexit, es hacer balance después de las 18 rondas que se han celebrado hasta la fecha actual desde que arrancó la negociación en octubre de 2021, sin que desde entonces hayan trascendido avances.

"Estamos en una fase en la que creemos que debemos hacer balance político del proceso", sostuvo entonces el socialista, incidiendo en que las conversaciones a nivel técnico están "en pleno apogeo". "Como hemos tenido bastantes negociaciones a nivel técnico, creo que ahora debemos avanzar con una evaluación de los progresos a nivel político", insistió, celebrando la "atmósfera constructiva" de las conversaciones.

Albares reconoce “acercamientos”

Por la parte del Gobierno de España, el titular de Exteriores reconoció este jueves que se han dado en las últimas semanas “acercamientos importantes” de las posiciones con Reino Unido “en las reuniones a nivel técnico”, por lo que ha tildado el escenario actual de “madura” para que se produzca un encuentro productivo.

“Tal vez mañana no sea el día final, porque son cuestiones complejas, pero ya empezamos a estar cerca para poder tener un acuerdo sobre las líneas generales”, ha expresado Albares en la mañana de este jueves en una entrevista concedida a Onda Cero. En los mismos términos, se ha mostrado confiado en que el pacto sobre el Peñón de Gibraltar se produzca “lo antes posible”: "Lo que constatamos todas las partes es que hay una dinámica muy positiva”, ha añadido.

Desde el departamento de Cameron, ya dejaron caer este martes que el acuerdo “no es inminente”, ya que consideran que el objetivo de la reunión de este viernes es proporcionar “una plataforma para avanzar aún más”.

Por su parte, el ministro de Gibraltar señaló el jueves que “es una oportunidad importante para progresar hacia la conclusión de un tratado”: "Afrontamos esta reunión de forma constructiva y con el deseo de que se avance en los temas, en la medida en que podamos hacerlo de forma segura y sin comprometer ningún aspecto de nuestros sacrosantos soberanía, jurisdicción y control", ha sostenido a través de un comunicado.

Tiempos difíciles de la negociación

Para entender el contexto de estas reuniones, cabe retroceder al 31 de diciembre de 2020, cuando se sentaron las bases del conocido como Acuerdo de Nochevieja, entre el Gobierno de Pedro Sánchez y el británico, entonces liderado por Boris Johnson. En este, se preveía la supresión de la Verja y la entrada de facto de Gibraltar en Schengen, por lo que los controles fronterizos se deberán trasladar al puerto y aeropuerto. En este punto, Reino Unido rechaza que los agentes españoles efectúen los controles, por lo que proponen que, en un plazo de cuarto año, esta tarea recaiga sobre la Agencia Europea de Fronteras (Frontex).

El fin último, según se han encargado de defender tanto Londres como Madrid, es instaurar una zona de prosperidad compartida en el Peñón y el Campo de Gibraltar. Ambos gobiernos también han dejado claro en todo momento que el acuerdo no afecta de ninguna manera a sus respectivas reivindicaciones de soberanía sobre el Peñón.

Aunque en todo este tiempo ninguna de las partes ha querido hablar de una fecha tope para el acuerdo, lo cierto es que el calendario de los próximos meses tampoco ayuda a perfilarla. De no cerrarse en las próximas semanas, la cita en las urnas de las elecciones europeas del 6 al 9 de junio dejaría la cuestión pendiente para la próxima Comisión Europea, que tomará posesión en el próximo mes de noviembre, dilatando así a finales de año esta decisión de calado.

A su vez, Reino Unido también tiene previsto celebrar sus propias elecciones generales antes de finales de enero de 2025, si bien se ha venido especulando con la posibilidad de que el primer ministro, Rishi Sunak, adelante la cita ante las urnas unos meses.

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