El próximo lunes José María Aznar y María Dolores de Cospedal serán los encargados de inaugurar el campus FAES 2014 en su calidad de presidente y vicepresidenta de la fundación, dando el pistoletazo de salida a una edición que mira especialmente a Cataluña y a la consulta convocada por Artur Mas. Pero la cita llega también precedida de movimientos subterráneos y filtraciones que apuntan a una lucha interna por el control de la fundación -clave en el dinero estatal que reciben los populares- y por la secretaría general del partido, que también es clave para el control de la factoría propagandística del PP.

Las riendas de FAES en el punto de mira...
Abría el fuego La Gaceta con una información que apunta a presiones de Mariano Rajoy para desalojar a Aznar de su reducto de FAES junto a buena parte de sus colaboradores. De hecho hablaban incluso de que había fecha para la salida y que en diciembre de este año Aznar dejaría las riendas de la fundación a Cospedal, que es la actual vicepresidenta porque los estatutos contemplan ese cargo para quien ocupe también la secretaría general. FAES y el PP niegan esos movimientos y el medio insiste en que existen.

... pero también la secretaría general
Pero no quedan ahí las filtraciones porque este jueves era otro digital el que señalaba en esta ocasión a la secretaria general, en su momento más débil tras los malos resultados de su partido en las europeas. Frente al terremoto público en el PSOE con salida de Rubalcaba y Congreso extraordinario para renovarse, en el PP todos los movimientos están siendo larvados, porque la preocupación es profunda. Y en ese sentido elconfidencialdigital asegura que los barones Alberto Núñez Feijóo, Juan Vicente Herrera, José Ramón Bauzá, Alberto Fabra y Juan Manuel Moreno han responsabilizado a Cospedal de la fuga de votos y exigen su marcha porque lo contrario sería "un suicidio" político. Sin embargo, Rajoy habría aparcado ese debate porque "ahora no toca".

Ese es el ambiente que están retratando medios de la propia órbita del PP en la antesala de uno de sus principales actos propagandísticos del año, pero cuando Aznar y Cospedal inauguren el campus de FAES y Rajoy acuda a clausurarlo a buen seguro que todo serán sonrisas y apelaciones a la unidad frente a Mas.