Tal y como ya informamos en ElPlural.com, la titular del Juzgado de Instrucción número 8 de Valencia, que instruye el caso Erial -en el que se investiga el dinero en sobornos que Zaplana ocultó en Panamá-, decomisó dinero en efectivo, propiedades inmobiliarias y vehículos de varios de los investigados de la causa. Entre ellos, a Eduardo Zaplana se le retiraron dos Audis, un Q7 y un Q3, por valor de 110.000 euros. Esto, sumado al dinero y al chalé en Benidorm, hace que el valor del dinero de los bienes decomisados a Zaplana ascendiera a 435.000 euros.

Pues bien, según Okdiario, hay novedades respecto a este tema, ya que la jueza María Isabel Rodríguez, instructora de la causa, ha entregado sendos automóviles embargados a la Guardia Civil. "La utilización de los vehículos está sometida a un protocolo que garantiza su mantenimiento, conservación, etc, no suponiendo por lo tanto ningún menoscabo”, ha justificado la magistrada. También argumenta que los automóviles de alta gama pasan a la UCO dada “la especial idoneidad que representan los vehículos a motor utilizados para la prestación del servicio público que desempeñan los cuerpos policiales y, concretamente en relación con la represión de ilícitos penales”.

El pago de los coches con dinero proveniente de la sociedad Costera del Glorio, gestora especializada en blanqueo de capitales -delito por el que Zaplana está siendo investigado-, ha sido el desencadenante para la retirada final de los vehículos y para la negación a la solicitud de devolución que hacía la defensa. Como ya dejaran por escrito los representantes de la UCO, la magistrada recalca que los cuerpos de policía tomarán las medidas necesarias para la conservación del vehículo.

Desconocemos cómo ha sentado esto a la familia, que recordemos que está atravesando momentos delicados por la leucemia que sufre el encausado expresidente 'popular'.