Sostres culpa de todos los males a "la trama socialdemócrata", que pretende que el dinero de los ricos mantenga a los pobres. "El problema es el paternalismo y la solución es la libertad y que cada cual se haga responsable de su vida. El problema son los pobres y la solución no es que los ricos les mantengan, sino que los pobres se pongan a trabajar y prosperen", asegura.

No al Estado del Bienestar
En el paraíso ultraliberal que propone Sostres, deberían abolirse las escuelas públicas y que sólo hubiera escuelas concertadas, que maestros y médicos dejen de ser funcionarios, que los hospitales sean privados y que desaparezca la sanidad pública casi por completo. "La solución es que el Estado pague sólo la sanidad de aquellos que realmente no se la puedan pagar, y que los demás aprendan a administrar su dinero, a ser responsables de su salud y de su vida, y a vivir según sus posibilidades", aboga.