El candidato número cuatro del PP al Congreso por Madrid, Daniel Lacalle, ha renunciado a ser diputado por Madrid, para facilitar la entrada de Marimar Blanco tras la renuncia ya anunciada esta mañana también de Andrea Levy, que iba de número seis. Con la marcha de sendos dirigentes, serán Marimar Blanco y José Ignacio Echániz, que no habían conseguido escaño en las elecciones del 28 de abril, quienes formen parte del equipo popular en el hemiciclo. 

Mientras la vicesecretaria de Estudios y Programas del PP ha alegado que quiere volcarse en la gestión del partido en Madrid, Lacalle realiza esta gesto "por generosidad" tras habérselo pedido la dirección del PP, tal y como han reconocido fuentes internas. Además, pasará a ser miembro de la Ejecutiva Nacional del PP y seguirá con sus funciones como responsable económico de la Fundación Concordia y Libertad, ligada a los populares y presidida por Adolfo Suárez Illana, número dos de la lista y candidato a ocupar un asiento en la Mesa del Congreso.

Daniel Lacalle, que fue en la lista del PP como independiente y ayudó a la redacción del programa electoral de las pasadas elecciones, es el referente económico del modelo liberal que Casado defendió hasta la saciedad en campaña. Estas han sido las palabras del gurú económico del partido liderado por Pablo Casado: "Considero que personas del calibre de María del Mar Blanco deben tener un escaño. Mi compromiso sigue intacto, así como mis responsabilidades en el área económica. Creo que la mejor manera de servir al proyecto del Partido Popular y su labor en el Congreso es ceder mi acta y seguir trabajando y aportando en el área económica apoyando al Comité Ejecutivo y la Fundación Concordia y Libertad". 

Un paso atrás forzado por una orden interna de la cúpula del partido, que aparta a dos de sus rostros más prolíficos en la última campaña para recuperar a dos dirigentes experimentadods y sumar su trayectoría a la difícil gestión de liderar la oposición en el hemiciclo.

Marimar Blanco, hermana del concejal asesinado por ETA en 1997, vuelve al ruedo como una de las personas más vinculadas a la Asociación de Víctimas del Terrorismo. También lo hace Echániz, exconsejero de Sanidad en la Comunidad de Madrid y en Castilla-La Mancha y hombre de confianza de la estructura.