El pasado 11 de junio, en el pleno de constitución del Gobierno local, los concejales de Izquierda Unida juraron sus cargos agregando una coletilla en la que se manifestaron partidarios de un Estado republicano, según Público.

El juramento de los ediles de IU
El edil izquierdista Pablo Muñoz expresó, además, su “solidaridad con algunas de las causas” de los indignados que en ese momento ocupaban la plaza del Pilar, sede del Ayuntamiento. Raúl Ariza defendió un modelo “federal, solidario y laico”. Y el portavoz del Grupo, José Manuel Alonso, agregó que aceptaba su obediencia al Rey “por exigencia legal”.

Descalificaciones desde las filas populares
En el salón de plenos y en las salas anexas, “personas del PP y sus invitados profirieron “descalificaciones” e insultos contra los representantes de Izquierda Unida, según denunció el portavoz de Izquierda Unida, José Manuel Alonso, que los consideró “propios de la dictadura franquista”.

El PP califica de "ilegal" la investidura
Este lunes, el portavoz del PP registró en el Ayuntamiento un escrito en el que se impugna ante el alcalde la toma de posesión de los tres ediles de IU y se califica de “ilegal” el acto, por lo que, pide que queden sin efecto “todos los trámites y actuaciones” posteriores y se invalide “todas las comparecencias, citaciones, designaciones para cargos o puestos”. Esto significa que se anularía la propia investidura de Belloch, porque –alegan- de no haber recibido el voto de IU y Chunta Aragonesista (CHA), jamás podría haber recibido la Alcaldía.

El Partido Popular se basa en una sentencia de 1985 del Tribunal Supremo y las sentencias de 1985 y 1990 del Constitucional, según las cuales “la fórmula ritual” con la que los concejales toman posesión de su cargo “no debe ir acompañada de cláusulas o expresiones que vacíen, limiten o condicionen su sentido propio”.