La nueva normalidad avanza en el Congreso y cada vez son más los diputados que acuden a los plenos celebrados en la Carrera de San Jerónimo.

La desescalada, iniciada por el Partido Popular el pasado 10 de junio cuuando hizo caso omiso al acuerdo que había llegado con el resto de los portavoces, decidió aumentar el cupo de diputados que le correspondía, de un 10 a un 25%, y llenar la mitad de sus escaños. De esta manera se empezó a ver la bancada popular con una butaca de separación entre diputado y diputado. No obstante, el uso de mascarillas por parte de los miembros del PP fue escasa, como se pudo ver en diferentes momentos del pleno.

Durante el pleno celebrado hoy, se ha podido ver como el PP ya no respeta la distancia que hace poco más de un mes tomaba como medida. En la sesión plenaria celebrada este miércoles se ha podido ver como todos sus diputados se sentaban pegados tal y como ocurría antes del confinamiento, a pesar que el resto de fuerzas dejan tanto los escaños laterales como el delantero y trasero libres.

Precisamente el uso de la mascarilla ha protagonizado hoy una de las anécdotas del día cuando un diputado popular era de los pocos miembros de la cámara en no llevarla puesta. El diputado era advertido por una compañera al ver en la realización que ofrece el Congreso al diputado sentado en la tercera fila del hemiciclo estaba sin ella.

Rápidamente, el diputado aprovechaba el juego de planos entre Pedro Sánchez y Pablo Casado para ponerse la mascarilla cuando el líder popular no estuviera enfocado. No obstante, el retraso con el que llegan las imágenes al Pleno ha hecho que se vea al diputado ponerse la mascarilla ya que en ese momento todo el mundo veía a Casado