La ceremonia de entrega de los despachos a los 63 nuevos jueces de 68 promoción ha quedado algo deslucida por las quejas de los familiares de los magistrados, a los que se les prohibió participar en el cóctel en el que estuvieron el Rey y las máximas autoridades del Poder Judicial en la Real Academia Española.

Los jueces recién nombrados departieron en ese cóctel con Felipe VI, el presidente en funciones del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y del Supremo y tres antecesores suyos, además de dos ministros, los 20 vocales del Consejo, 13 miembros de la Sala de Gobierno del Supremo, los 17 presidentes de los Tribunales Superiores de Justicia y demás autoridades, según Confilegal.

"No nos dejaron bajar"

Los familiares de los nuevos jueces, llegados de diversos puntos de España, se tuvieron que conformar con otro cóctel en una sala situada en una planta superior a donde se realizaba la ceremonia. “Es una pena, tuvimos que estar la mayor parte del tiempo en la primera planta. No nos dejaron bajar”, explicaron unos familiares a la citada publicación.

Los familiares se quejaron de que “el sitio era pequeño e inadecuado. Sí, muy bonito. Pero mi hija estaba abajo y nosotros arriba, sin poder bajar”. Todos devieron permanecer en el primer piso, entre la una de la tarde, en que terminó el acto, y las dos, en que abandonó el Rey el edificio de la Real Academia Española.

Con motivo de la ceremonia se reunieron casi 500 personas y cada alumno llevó a tres o cuatro familiares,  la mayor parte de las cuales fueron ubicadas en el primer piso. También hubo una sala adyacente con una pantalla de televisión para que pudieran seguir el acto desde ahí, según explicaron fuentes presenciales. Los organizadores prohibieron bajar o subir por las escaleras durante las fotos de las autoridades.

La primera ceremonia en Madrid

Esta era la primera ceremonia que se celebra en Madrid desde 1997, cuando la Escuela Judicial fue trasladada a Cataluña, donde el acto se realiza habitualmente en el Auditorio de Barcelona, un espacio amplio en el que caben todos los invitados, pero que este año se descartó por la tensión independentista.