El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha iniciado su intervención en el debate de la investidura con mensajes para tranquilizar a la sociedad española, tras las acusaciones de los partidos de la derecha de cesiones a los independentistas catalanes. "No se va a romper España, no se va a romper la Constitución.  Aquí lo que se va a romper es el bloqueo al Gobierno progresista democráticamente elegido por los españoles", ha dicho el líder socialista, que ha agradecido a los ciudadanos su "paciencia" y su carácter "democrático".

"Los españoles situaron al PSOE en noviembre como primera fuerza, muy por delante de cualquier otra fuerza. Y no eran las primeras elecciones. No solo el PSOE es la fuerza más votada, sino que con los resultados de las últimas elecciones no cabía otra mayoría parlamentaria como la que hoy vamos a presentar", ha recordado Sánchez, que ha reivindicado los 140 años de historia de su partido.

"Un partido español"

"Cuando un partido, u otra institución, perdura de forma prolongada durante el tiempo, significa que hunde sus raíces en razones profundas de la sociedad, que da voz a millones de españolas y españoles", ha dicho el líder socialista, que ha insistido en las raíces del PSOE: "Un partido español, formado por compatriotas, que con aciertos y errores ha contribuido y contribuye al avance de la sociedad".

El líder del PSOE ha subrayado que los españoles no votaron ni bloqueo ni parálisis, sino Gobierno y soluciones y ha criticado a las formaciones de la derecha por "negarse a solucionar la gobernabilidad", y que, a pesar de sus "temores" no hayan movido un dedo para evitar que se haya tenido que pactar con Unidas Podemos y ERC.