Casa Real ha guardado silencio ante la vulneración de los derechos humanos en Qatar, país sede del Mundial de Fútbol de este año, tras las preguntas planteadas este lunes por ElPlural.com. Sin embargo, antes de cortar su comunicación telefónica con este medio de comunicación, la institución monárquica sí que ha confirmado la asistencia de Felipe VI al partido que disputarán las selecciones de España y Costa Rica el próximo 23 de noviembre.

Felipe VI acudirá el miércoles”, ha corroborado el departamento de prensa de Casa Real acerca de la futura presencia del rey en el estadio Al Thumama, tal y como está previsto en su agenda oficial. Con su asistencia a este encuentro deportivo celebrado en Doha, capital de Qatar, el español será el único monarca de toda Europa que se deje ver durante la fase de grupos del Mundial de Fútbol.

Precisamente, la selección española, entrenada por Luis Enrique, jugará por primera vez en este evento internacional en el partido al que Felipe VI asistirá, según lo previsto por Casa Real. El miércoles a las 19, hora local de Qatar, es la fecha asignada por la organización del Mundial de Fútbol para España al encontrarse ubicado en el Grupo E, aunque la competición ya haya dado inicio a sus juegos este domingo, 20 de noviembre.

Casa Real guarda silencio sobre los derechos humanos en Qatar

Ante la pregunta de este medio de comunicación sobre la nula garantía de los derechos humanos en Qatar, país sede del Mundial de Fútbol de este año, Casa Real ha guardado silencio. De hecho, este lunes, mismo día en el que ElPlural.com ha entrado en contacto con la institución monárquica para conocer su postura con respecto a este asunto, las selecciones de fútbol han cedido a la amenaza de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) para no llevar el brazalete LGTBI durante los partidos de este evento deportivo internacional.

Las federaciones nacionales de Alemania, Inglaterra, Gales, Dinamarca, Suiza y Bélgica han denunciado en un comunicado conjunto que la organización internacional les ha trasladado su intención de imponer sanciones deportivas como una tarjeta amarilla a los capitanes que porten el brazalete LGTBI. Por este motivo, las selecciones de fútbol mencionadas han abandonado su compromiso con los derechos del colectivo que representa la diversidad sexual y de género mediante la exhibición de un elemento que refleja los colores arcoíris incluidos en su bandera.

Desde que se llegó a un acuerdo entre dichas selecciones de fútbol nacionales hace un mes, representantes de estas organizaciones deportivas aseguraron que no se retractarían en sus intenciones ante una posible sanción de la FIFA por reivindicar los derechos humanos, concretamente los de la población LGTBI, mediante un brazalete lucido por sus respectivos capitanes con los colores de la bandera que representa al colectivo. Incluso, las diferentes federaciones anunciaron que asumirían una posible multa por parte de la institución de fútbol internacional para denunciar el ataque a los derechos, entre otros, de diversidad sexual y de género en el país donde se celebra este mundial de fútbol, Qatar, pero finalmente no ha sido así llegado el momento.