El pasado miércoles, la Basílica del Valle de los Caídos vivía un acontecimiento inédito hasta la fecha. Un artista profanó la tumba del dictador Francisco Franco, dibujando una paloma de la Paz. El hombre también escribió junto a la lápida “por la libertad”, instantes previos a la misa de las 11.00 horas.

Acto seguido, la Guardia Civil lo detuvo tras acometer el acto. El artista fue interceptado por la seguridad de Cuelgamuros, pero necesitaron de la presencia de la Benemérita para reducirlo. El hombre fue increpado por varias personas en el interior de la Basílica, pero este acotaba que no está en contra de la “unidad de España”, pero indicaba que “Franco mató a muchísima gente”.

A tenor de estos acontecimientos, en las páginas del diario ABC, Carlos Herrera plasma su reflexión. Unas líneas en la que el médico y locutor no encuentra otro culpable de los problemas actuales de España que la “izquierda”. Comenzaba su columna narrando los hechos que acometió “un cretino autoconsiderado artista”.

Relacionado El vídeo del asalto a la tumba de Franco

Tras el relato de lo acontecido, Herrera señala que si la legislación que pretende el “tándem PSOE-Podemos” estuviera en vigor, al individuo “le darían una beca para cursar sus estudios de escultura en la misma Francia”. Sin embargo, el locutor considera que si la pintada se hubiese hecho en la estatua de Largo Caballero, al que califica como el “Lenin español”, al “gilipollas en cuestión le caería la mundial”.

El diagnóstico del ‘doctor’

Herrera pide que “nos dejen vivir sin la asfixia del enfrentamiento permanente”, aunque acto seguido estira el brazo para posar su dedo acusador sobre la izquierda. Y es que considera que este “revanchismo” tiene su germen en la “teoría revisionista” del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero. Una conjetura que, en palabras del locutor y articulista, se basa en el regreso al “maniqueísmo de los buenos y de los malos”.

Destaca que los españoles actuaron con “extraordinaria generosidad” en la segunda etapa de la década de los setenta. Unos convulsos en los que, hasta los “comunistas” dieron una lección de “patriotismo y realismo”. Un grupo que Herrera repudia, pero reconoce que sufrió “provocaciones y asesinatos” durante el Franquismo. Sin embargo, aceptaron la “Corona y la Bandera con tal de caminar hacia la concordia y la democracia”.

Pero Carlos Herrera, más allá de criticar al Gobierno actual por la “improvisada” actuación para con los restos del dictador, elabora su diagnóstico sobre la situación de la España actual. Herrera considera que el “problema está en la izquierda” que desentierra a Franco, porque alienta a los “idiotas” prestos y dispuestos a pintar en tumbas de personas “de las que nadie se acuerda”.