El viento azota sin piedad el erial del Campus de la Justicia, el proyecto megalómano de Esperanza Aguirre y su consejero de Justicia, Alfredo de Prada que ahora investiga el juez José de la Mata, en la Audiencia Nacional. Pero antes incluso de convertirse en un agujero negro de dinero público, cuando apenas era una idea en el aire, el Campus de la Justicia ya empezó a vaciar los bolsillos de los madrileños y en sus primeros pasos el Gobierno regional gastó 393.500 euros solo en propaganda.
El secarral situado al norte de Madrid empezó a convertirse en la cabeza de Esperanza Aguirre en un centro neurálgico de todos los tribunales de la Comunidad de Madrid y allá en los albores de 2005, la lideresa puso en marcha algo en lo que era experta: una campaña de publicidad ingente.
Curiosamente, para encontrar las facturas de aquellos primeros días, hay que acudir al sumario del caso Púnica, cuando el juez instructor Eloy Velasco se interesó en saber qué tajada había sacado la trama de este pozo sin fondo. Porque, si algo ha caracterizado al Campus de la Justicia es que, en lugar de aunar tribunales, acabó uniendo a sospechosos judiciales de Gürtel y Púnica. De hecho, los gastos que aquí se detallan, son previos a la colocación de la primera piedra, un acto que costó 1,4 millones de euros que pagó Begar, la empresa de José Luis Ulibarri, implicado en Gürtel y Enredadera.
En marzo de 2017, en el marco de su investigación en Púnica, Velasco preguntó a la Comunidad de Madrid sobre ciertas empresas de las que sospechaba (Over Marketing y Comunicación, Traci Comunicación, Abanico Comunicación y Link América) y empezaron a aflorar facturas.
La primera, de Traci y fechada en octubre de 2015, está valorada en 116.145 euros. El proyecto era una entelequia pero ya se había encargado “una producción audiovisual”, o vídeo, rodado en el palacete Duque de Pastrana en el que no faltaba ningún detalle y del que se realizaron 400 copias en DVD.
Aunque quien más partido le sacó fue Over Marketing, una empresa ubicua en varias tramas de corrupción que afectan al Partido Popular. En los primeros compases del proyecto, esta empresa ya facturó 60.405,65 euros a la Comunidad de Madrid por poner publicidad de escasa calidad del futuro Campus de la Justicia en los cuatro grandes periódicos de tirada nacional. Unos meses después, aparece otra factura de 4.872,00 euros por realizar 500 folletos trípticos y otros tantos DVD para promocionar la idea.
Los beneficios de Over Marketing en la promoción de los primeros pasos del Campus de la Justicia no se quedan ahí. A finales de 2006 facturan a la Comunidad de Madrid 41.550,45 euros por poner una lona en la parada de taxis de la T4 del Aeropuerto de Barajas anunciando el proyecto. Y a principios de 2007 una nueva factura por crear un nuevo logo para el proyecto, que costó 4.355,80 euros.
Aunque la mayor tajada de Over Marketing tuvo que ver con los beneficios del acto más importante de aquella primera época: la presentación de la maqueta de Norman Foster para sus edificios del Campus de la Justicia que tuvo lugar en noviembre de 2006 en la Real Casa de Correos, en la Puerta del Sol, donde estaba el despacho de Esperanza Aguirre.
Para darle más empaque a la presentación del afamado arquitecto, no se escatimó en gastos y se montó un acto con cóctel amenizado por un DJ donde lo más barato fue la nómina de las azafatas, que costaron 440 euros. En total, Over Marketing facturó 92.238,59 euros.
Uno de los múltiples actos de Esperanza Aguirre para presentar maquetas del Campus de la Justicia
A esto hay que sumar otros conceptos, como las propia maquetas, que aparecen referenciadas en la frenética contabilidad del Campus de la Justicia por 69.964,40 euros y encargada a un taller local. Si a esto añadimos que el estudio del arquitecto británico cobró más de 10 millones –y eso que pedían 13- por diseñar los edificios del Tribunal Superior de Justicia de Madrid y la Audiencia Provincial, que nunca han llegado a construirse, el coste de la propaganda se dispara.
Y por si el evento de la Puerta del Sol se quedaba corto, el mismo día, pero pocas horas antes, se celebró una rueda de prensa para presentar, aún más, la maqueta de Foster en la Consejería de Justicia de la Comunidad de Madrid. De este acto también se encargó Over Marketing, aunque el presupuesto fue mucho más ajustado: 3.996,47 euros. Eso sí, se trataba de presentar dos veces la misma maqueta. Tan kafkiano era el asunto que la empresa cobró a la Comunidad de Madrid 290 euros por trasladar la maqueta de la Consejería a la sede de Presidencia. Es decir, por cruzar una calle peatonal. Un recorrido de apenas 50 metros.
