Dispuesto, “desde luego”, a poner la mano en el fuego por Rita Barberá. Así de seguro se ha mostrado este lunes el expresident de la Generalitat Francisco Camps en una rueda de prensa en la que se ha atrevido incluso a decir que haría lo mismo con “todos los españoles que todavía no tengan una sentencia firme”.

Su principal objetivo era defenderse a sí mismo de las informaciones que le señalaban como supuesto “recaudador” de los contratos que habrían facilitado la caja B del PP en Valencia y lo ha hecho mostrándose indignado y alterado. Ha recordado que es doctor en Derecho y abogado, y ha destacado que en las sociedades civilizadas existe el Estado de derecho y la presunción de inocencia, pese a que hay personas como Juan Carlos Monedero, Íñigo Errejón e Iglesias que quieren que esa presunción "brille por su ausencia".

Camps no ha querido precisar si se siente protegido o no por el PP. Ha preferido verse "defendido por la verdad" y por los años que ha estado al frente del PPCV y de la Generalitat.

Quizás por ello, la rueda de prensa no se ha celebrado en la sede del PP de Valencia, sino en un hotel. Un terreno “neutro”, ha dicho. Así, se ha evitado hablar del partido, aunque si ha elogiado a Isabel Bonig calificándola como una presidenta "extraordinaria”.

Rita está triste
En su enérgica defensa, también ha tenido tiempo para echarle una mano a la que fuera alcaldesa de Valencia en su etapa como president, Camps ha asegurado que Barberá no se ha llevado nada, "ni un paquete de rosquilletas" ha puntualizado, y prueba de ello sería que vive de alquiler o que tiene un coche "de hace doscientos años, prácticamente tendría que ser un coche histórico".

"Rita Barberá es una mujer extraordinaria, de primer nivel, de quien se sienten orgullosos los valencianos, el resto de los españoles, y de la que se hablará toda la historia de esta ciudad", porque ha estado "un cuarto de siglo al servicio de los valencianos", ha resaltado.

Según ha explicado, ha podido hablar con la exalcaldesa y, por ello, ha constatado que está "triste y dolida" después de haber "dado toda su vida por Valencia". "No se lo merece", ha añadido.

“Miedo político” y “pavor” a Camps

Camps también ha tenido palabras para el president de la Generalitat, Ximo Puig, y la vicepresidenta del Gobierno valenciano, Mònica Oltra, de quienes ha dicho que "se pasan el día sacando cosas" para "abatir al adversario" y hablando de él porque le tienen "miedo político", incluso "pavor".

"Los socialistas de verdad no son como Puig", ha aseverado Camps, quien ha afirmado que Compromís tiene "una obsesión" con él, porque nunca le ganaron las elecciones”. Haciedo uso de la videncia, ha augurado que la formación de Oltra "saltará por los aires" a pesar de "lo potente que era".

A Puig, le exige que le pida perdón por haber tenido "la barra" de recurrir al Tribunal Supremo "la decisión de absolución del pueblo valenciano" en la causa de los trajes del caso Gürtel. "Menudo independentista, o nacionalista o lo que sea", ha añadido.