Buena parte de los focos están sobre él a pesar de no participar de manera directa. José María Aznar impregna las primarias del Partido Popular. Varios candidatos, concretamente María Dolores de Cospedal y José Manuel García-Margallo, sacaron a colación su nombre para relacionarlo con la candidatura de Pablo Casado, que ya ha tildado de aznarista. El expresidente del Gobierno ha concedido una entrevista en Onda Cero en la que ha insistido en que se mantiene y se mantendrá al margen. Tanto es así, que ha asegurado que no se ha inscrito para votar y, de hecho, no sabe si está al corriente de pago.

La entrevista ha arrancado con algunas bromas sobre la “expectación” que genera. Rápidamente, a la primera pregunta, Aznar ha afirmado que sigue teniendo el carnet del PP pero no sabe si está al corriente de pago de la cuota: “Voy a estar al margen. No me he inscrito y no voy a participar porque creo que mi posición es estar al margen. Deben ser otros los que protagonicen las posiciones más importantes. España necesita un proyecto de futuro y el PP necesita un proyecto de futuro para España”.

A su juicio, los procesos internos nunca son perfectos, pero le parece bien que “los militantes tengan voz y decidan”.

El periodista Carlos Alsina ha insistido en quién es su candidato, a lo que Aznar ha respondido una y otra vez con la misma fórmula: “Me mantengo al margen”. Lo que sí ha precisado es que “yo no he cambiado de posición” y que “el problema de los candidatos en relación conmigo es una cuestión relativa a los candidatos” porque “yo sigo estando donde he estado siempre. El que ha cambiado su posición es el PP, y esa es una de las cosas que tienen que corregir”.

Según Aznar, “el PP era un partido que había ofrecido un activo de estabilidad inapreciable. Era una garantía de estabilidad, de permanencia y seguridad. Eso desgraciadamente se ha perdido y la pérdida de ese activo es una gran tragedia. Algunos tendrán que responder y tienen que explicar por qué. Ese activo fue el que se entregó, y ya no existe”.

Casado, Ciudadanos, Rajoy y Fraga

El expresidente ha apuntado que esta misma expresión la ha pronunciado en ocasiones anteriores y “se me acusaba de desleal”. Y es que, Aznar no es precisamente halagüeño. A la pregunta de Alsina de si la formación está en peligro de extinción se ha limitado a decir que “depende”: “Si no es refundado, dejará de ser de Gobierno y la estructuración de centro-derecha se hará con otras bases. Y Ahí está Ciudadanos”.

Sobre que Casado sea el candidato “aznarista”, Aznar ha subrayado que el “aznarismo era una cosa tan extraña como que el supuesto líder renunció a la vida política. No creo en los proyectos personales”. Según Aznar, le es “indiferente” y “me da igual” que se saque su nombre a colación: “Ellos son los candidatos, supongo que serán cosas de campaña electoral. Aunque a veces resultan sorprendentes las cosas que dicen…”. Eso sí, no ofrece ejemplos de lo que le resultó sorprendente.

Aznar ha zanjado el asunto sentenciando que “si me va a hablar mucho de apellidos es mejor que hablemos de la Selección”. 

Lo que sí ha mencionado que es que “a veces parece que cuando hay personas que se han dedicado durante bastante tiempo una parte importante del PP, pues que hagan un ejercicio de desmemoria... Las cercanías yo no las marco, estoy donde estaba”. Además, ha señalado una curiosidad: [Cospedal y Santamaría] estuvieron las dos en el Gobierno en mi etapa. El único que no estuvo fue Pablo Casado.

A su juicio, la condición más importante de un líder político “es la claridad moral” porque “vivimos tiempos de inmensa confusión”.

Al ser preguntado por su relación con Mariano Rajoy, ha relatado que cuando él, Aznar, llegó a La Moncloa, “la primera persona a la que invité fue a Manuel Fraga, porque yo no me olvido por quién estoy aquí. Lo que hicieron otros… Cada uno hace lo que le parece”.

Asimismo, ha ofrecido algunos detalles sobre por qué eligió a Rajoy como su sucesor. “Era el que tenía menos inconvenientes”, ha dicho. Al parecer, Rodrigo Rato no quiso serlo y el otro candidato era Jaime Mayor Oreja.

En cuanto a RTVE, ha desvelado que durante su etapa se barajó su privatización, o al menos, de un canal.