Un colectivo ha sido especialmente protagonista, entre comillas claro está, de estos atentados ocurridos en París. Es el de futbolistas, en primer lugar, porque según apuntan las pesquisas de los expertos franceses en materia antiterrorista, uno de los objetivos más evidentes de los suicidas era el Estadio de Francia, donde se disputaba un encuentro amistoso entre la selección local y Alemania. Todavía resuenan en los oídos las explosiones escuchadas, por la proximidad de las detonaciones, en el recinto y que, incluso, muchos asistentes creyeron que formaba parte del espectáculo llegando a aplaudir el momento. Pero la realidad era bien distinta.

De hecho, alguno de los futbolistas que disputaron ese encuentro, se vieron directamente afectados por los ataques. Sin ir más lejos, el ex jugador del Real Madrid, Lass Diarra, no sabía que mientras él jugaba al fútbol con la elástica de su país, una prima perdía la vida en la sala Bataclan. Quiso despedirse de quien "era para mí una hermana" con una emotiva carta difundida a través de las redes sociales.


También otro integrante de la selección gala tenía a su hermana en esa sala. Se trata del colchonero Antoine Griezmann. Tras pedir ayuda el mismo viernes después del partido contra Alemania a través de las redes, finalmente pudo "dar gracias a Dios" porque su ser querido se encontraba bien.

 


 

Hay una circunstancia que ha provocado que muchos jugadores que juegan en España u otras ligas hayan podido viajar para descansar algunos días, y es el parón en los campeonatos por las convocatorias de las selecciones nacionales.

Casualmente, París ha sido el destino elegido por muchos de ellos. Por ejemplo, Arbeloa, el defensa del Real Madrid, que tenía la intención de ir a Eurodisney con su familia, o Sergi Roberto, del F.C. Barcelona.

 

 

 

 

 

Esta es la foto subida a Twitter por Sergi Roberto, jugador del F.C. Barcelona, desde París. Foto: @SergiRoberto10

 

 


Pero no solo los jugadores españoles han aprovechado el parón de selecciones para visitar París. Martin Kelly, del Cristal Palace inglés, estaba presente en la capital gala el viernes por la noche. Antes de iniciarse la oleada de ataques envió una foto y un comentario sobre una cafetería en la que se encontraba tomando algo. A partir de los atentados se especuló en las redes con la posibilidad de que hubiese afectado a ese local en el que estaba Kelly. Al final todo quedó en un susto.

 

 

 

 

 


 

Quien no ha tenido tanta suerte ha sido Aristide Barraud. También es jugador profesional pero de rugby. Se encontraba en las inmediaciones de la sala Bataclan y recibió dos disparos, uno en el pulmón y otro en la pierna. A pesar de la gravedad inicial, parece que su vida ya no corre peligro.