“¿Por qué Camps no se fue antes de ser candidato?...No lo sé”
Que el ejemplo de dignidad de Camps llegara cuando le procesaron no le merece a Fabra ninguna reflexión, ni pone en duda el valor moral sobre su antecesor. Es más, cuando se le pregunta por qué ante la evidencia de que iba a acabar en el banquillo “no se le presionó antes”, Fabra reconoce que “no lo sé” y pasa al capítulo de las justificaciones:
“Estamos hablando de un presidente de la Generalitat que quiere defender su honorabilidad y la de la institución. Es una demostración de su valentía (…). Ha tomado una decisión que es un ejemplo para todos. Va a defender su inocencia impidiendo que alguien pueda meterse con el partido o con la institución. Merece nuestro aplauso y reconocimiento”.
Los políticos tienen mala imagen… por culpa del PSOE
Con la visión de la realidad que muestran estas respuestas enmarca Fabra su contestación a la pregunta sobre la mala imagen de los políticos entre los ciudadanos: “Lo achaco principalmente –dice el President valenciano- al Partido Socialista con su manera de entender la política. A base de confrontación y enfrentamiento entre ciudadanos y entre partidos, ha llevado a esa deriva de falta de credibilidad en los políticos”.
En esta misma línea de lógica Albert Fabra expresa convicciones como que las Comunidades Autónomas “hemos sido muy rigurosas” en el control del déficit, mientras el Gobierno “ha estado generando un déficit que ahora estamos sufriendo todos, también las CC.AA. y los ayuntamientos”.
Cien mil votos valencianos más para Rajoy
Albert Fabra, que reconoce el apoyo que obtuvo de su líder, Mariano Rajoy, para acceder a su actual cargo –“ese aval me ha permitido estar aquí, pero lo importante es la vocación de servicio”-, se reafirma en una promesa que hizo al candidato popular, conseguir para él 1.500.000 votos en las próximas generales a celebrar el 20-N, lo que sería 100.000 votos más de los que obtuvo el PP en Valencia en 2007.
“Estoy convencido (de lograrlo), porque aquí hay una situación de rebelión política. La gente ya no puede más. Nos han estado engañando durante muchísimo tiempo. Han generado falta de optimismo, de ilusión, de confianza”. Pero al decir esto Fabra no parece referirse a la trama Gurtel ni a Camps, sino al Gobierno en Madrid.
