La identidad de las dos personas que el PP mandó para negociar con Luis Bárcenas ha sido una incógnita. Ni siquiera en la confesión del extesorero hace unos días a la Fiscalía Anticorrupción, donde confirma que los dos emisarios del Partido Popular redoblaron en los últimos años los esfuerzos para tratar de garantizar su silencio, la identidad de estas dos personas ha sido descubierta.

Ahora, El Confidencial ha podido saber que uno de ellos es Jesús Santos, el abogado que representa el PP en el juicio de la presunta caja B. Según desvela el citado medio, Santos tuvo varios encuentros con un amigo íntimo del extesorero cuando terminó el juicio sobre la trama Gürtel, en 2017.

Por si fuera poco, lo hizo por indicación del actual consejero de Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid, Enrique López. Las citas, "se alargaron tres años, hasta al menos 2018" además, "fueron más de una docena".

Las conversaciones entre PP y Bárcenas se llevaron acabo en el más absoluto secreto a través de un intermediario del extesorero. La primera reunión se produjo en noviembre, después de que el juicio de la Gürtel quedara visto para sentencia. Siempre según el citado medio, "todos los encuentros contaron con la aprobación del partido, a quien Santos consultaba antes de recibir al amigo de Bárcenas, Agustín".

El principal temor de Bárcenas era el destino de su mujer, Rosalía Iglesias, que también se sentaba en el banquillo de los acusados y sobre la que pesaba una elevada petición de penas de cárcel. También el PP estaba acusado por Anticorrupción así que llegaron a un acuerdo donde Bárcenas protegía al que había sido su partido a cambio de la promesa de los populades de que su mujer no entrara en prisión.

Esta promesa no se pudo sostener y ahora, con Iglesias en prisión, Bárcenas confesaba. “Mi segunda declaración en la pieza de los papeles no se compadece con esta línea de colaboración, toda vez que, con ingenuidad, di por buena la promesa que se me había hecho llegar a través de intermediarios de que mi mujer, Rosalía Iglesias, no entraría en prisión a consecuencia de la sentencia de la pieza Época 1. De hecho, ya hice constar en mi declaración del 15 de julio de 2013 que había recibido presiones con el fin de guardar silencio y no incriminar ni manchar el buen nombre del que era mi partido ante el riesgo de que mi mujer pudiera entrar en prisión" decía.

"El sentimiento de culpabilidad de haber podido provocar que mi mujer estuviese en riesgo de perder la libertad y entrar en prisión me hizo creer, inocentemente, en la promesa ―por parte del Partido Popular― que unos meses después a esta declaración del 15 de julio se me hizo llegar sobre que Rosa no entraría en prisión gracias a las gestiones que se habían iniciado. De ahí que firmara ―podíamos llamar― `la paz’ con dicho partido político, retirando la denuncia que había interpuesto por la destrucción de la información contenida en ordenadores de mi disposición personal, o de mis pretensiones laborales en la jurisdicción laboral a consecuencia de mi salida del Partido Popular”, proseguía relantando en su confesión.

Por su parte, Santos es el principal abogado del PP. El ex fiscal de la Audiencia Nacional ha representado hasta en tres ocasiones por casos de corrupción del partido: cuando el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz envió a una comisión judicial a Génova 13 por la reforma de la sede, la defensa del PP en la Gürtel y la defensa del PP en la destrucción de los ordenadores de Bárcenas.

Este lunes, Jesús Santos ha apuntado que cada una de acusaciones populares tienen una "vinculación política" con partidos de la bancada opuesta a la del PP y que quieren el "desfile" en la Audiencia Nacional de "expresidentes, exsecretarios generales y altos cargos" del partido para contribuir al "circo mediático".