La escuela de novias nazis sitúa al lector en Alemania, en 1939, justo antes del estallido de la Segunda Guerra Mundial. La novela sigue la historia de Hanna Rombauer, una joven alemana que, tras la muerte de su madre, es enviada a Berlín para vivir con sus tíos. Allí descubre un mundo de lujo y ambición que poco tiene que ver con su vida anterior.
Sin preguntarle, su familia la compromete con un oficial de las SS y la envía a una exclusiva villa donde el régimen forma a las futuras esposas “perfectas”. En ese lugar, entre normas de obediencia, prejuicios y misoginia, Hanna empieza a darse cuenta de que ese futuro no es el suyo y siente la necesidad urgente de escapar.
En esa elegante villa el régimen instruye a las futuras esposas del nazismo inculcando el silencio, la sumisión, la pureza y la devoción al Führer. Un internado de apariencias donde el odio se enseña con la misma naturalidad que el bordado.
En paralelo, la novela presenta a Mathilde Altman, una joven judía embarazada que intenta sobrevivir a la persecución nazi tras ser despojada de su trabajo, su entorno y su vida anterior. Dividida entre sus raíces —mitad alemana, mitad judía— y marcada por la traición de un padre que reniega de ella para salvarse, Mathilde vive escondida en un bosque cercano a la escuela donde Hanna se entrena para un destino que no desea.
El cruce de ambas historias surge cuando Hanna descubre el refugio de Mathilde y decide ayudarla, aunque ello suponga enfrentar de lleno el engranaje represivo del régimen. Su gesto, en apariencia pequeño, se convierte en un acto de resistencia que cuestiona todo el edificio moral de la Alemania nazi. A este tenso triángulo se suma Klara, otra joven alemana moldeada por las normas del Reich, personaje clave cuyo crecimiento y ambigüedad moral aportan matices decisivos al relato.
La autora construye una narración ágil, alternada en dos voces principales —Hanna y Mathilde— que mantienen la tensión en todo momento. Su mayor acierto es revelar la estructura cotidiana del nazismo: la obediencia premiada, la amistad convertida en moneda de cambio, la mujer reducida a instrumento del Estado y el miedo como columna vertebral de la sociedad. En ese escenario, cada personaje muestra una grieta distinta, desde la brutalidad ciega del oficial Friedrich, pasando por la calculadora frialdad de la tía Charlotte, hasta el inesperado coraje de quienes deciden arriesgarlo todo por un recién nacido que aún no ha visto la luz.
Esas escuelas existieron y ahora se conocen más datos
Inspirada en descubrimientos recientes sobre las auténticas “escuelas de esposas nazis”, esta novela publicada por Espasa (Planeta) ofrece una mirada contundente al proceso de adoctrinamiento femenino bajo el Tercer Reich. Y lo hace sin perder de vista la humanidad de sus protagonistas ni la brutalidad histórica del contexto. Una lectura que combina emoción, rigor y suspense, capaz de conmover y de recordar —sin concesiones— que los engranajes del odio siempre comienzan por la obediencia.
Una obra recomendada para quienes buscan literatura histórica con alma, tensión y una clara vocación de memoria frente a la barbarie.