No hace falta coger un avión para disfrutar de aguas cristalinas que recuerdan a los mejores escenarios brindados por el Caribe. No es necesario porque a muy pocos kilómetros de Madrid se encuentra todo un idílico paraje para relajarse y contemplar la belleza que ofrece la naturaleza.
De aguas cristalinas color turquesa, blanca arena fina y un frondoso paisaje caracterizado por la extensa vegetación. Así es el remanso verde que se encuentra en el municipio conquense de Enguídanos, en el centro de Castilla-La Mancha.
Se trata de Las Chorreras del Cabriel, un lugar escondido para los bañistas en el que podemos darnos un buen chapuzón, relajarnos y disfrutar de este tesoro verde. Este oculto paraje natural en la provincia conquense le debe su nombre por el río Cabriel, declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO desde el año 2019.
Lo que más caracteriza este monumento natural son las tobas, que han logrado transformar idílicamente el paisaje trascendiendo en uno de los lugares de mayor importancia geológica de toda Europa.
Aquí encontraremos cascadas, saltos de agua y pozas de agua turquesa a menos de tres horas de la capital madrileña. La oferta de actividades es muy variada, pues también podremos realizar senderismo, deportes acuáticos y turismo de naturaleza, especialmente, en observación de aves.
Debido a la afluencia de turistas que se acercan a esta zona, los Ayuntamientos de Enguídanos y Víllora han habilitado un máximo de 300 personas al día “independientemente de la actividad a desarrollar dentro del espacio”.
“Se podrá concertar una reserva previa para la visita a través de medios digitales habilitados” por los Consistorios. También limitar el número de personas que pueden hacer barranquismo, con hasta 140 visitantes al día en grupos de no más de 20.
Cómo llegar
Para acceder a este oasis natural, partiremos desde el pueblo de Enguídanos por la carretera CUV-5014 hasta el aparcamiento habilitado por el Ayuntamiento junto al desvío hacia la Central Hidroeléctrica Lucas de Urquijo.
También podemos acceder desde Víllora a través de un camino no asfaltado hasta el aparcamiento habilitado por el Ayuntamiento en el paraje de los Picarchuelos.
A partir de aquí se puede acceder en coche, pero para los amantes del trekking también está la opción de realizar una ruta de senderismo. La ruta homologada es la que recorre todo el monumento natural de las Chorreras del Cabriel partiendo desde el pueblo de Enguídanos y regresando a éste.
Aunque, también hay más destinos turísticos en los que hacer una parada como son las zonas naturales en Enguídanos y Víllora. En el primer destino, podemos visitar la Playeta de la Lastra, el Castillo Fortaleza de Enguídanos o el Centro Histórico de este lugar.
En el caso de Víllora, los visitantes podrán disfrutar de la Playeta de Víllora, el Torreón del Castillo de Víllora y su Casco Urbano.
Normas para todos los visitantes
Hay que tener en cuenta que se trata de un paisaje natural protegido y es esencial mantener el respeto al medio ambiente. Por ello, los bañistas y turistas que deseen disfrutar de las maravillosas vistas de este paraje tendrán que considerar las normas de los visitantes.
En primer lugar, es obligatorio realizar una reserva de aparcamiento y estacionar en la zona del parking. “Recordemos que en un tramo de 5 kilómetros está prohibido aparcar bajo sanción por la guardia civil”, avisan las autoridades conquenses.
También indican que puede haber un incremento del caudal del río sin previo aviso. Además, apuntan que una vez dentro del monumento natural, hay que circular por el sendero marcado a la izquierda.
Para los bañistas, existe una zona marcada y solo podrán acceder al agua en las pozas señalizadas. “Recordamos que está prohibido pisar las cascadas así como las zonas donde está fluyendo el agua”, añaden.
Como en la mayoría de casos por riesgo de incendio y, especialmente, tras el aumento de las temperaturas, está prohibido hacer fuego, fumar y llevar pertenencias con vidrio. Está prohibido también usar jabón o verter líquidos en el agua.
Del mismo modo, las autoridades prohíben el uso de sombrillas, sillas, mesas y enseres que puedan dañar la roca, al igual que en el agua con los flotadores o colchonetas durante el baño.
Para más información, el municipio ha habilitado una página web en la que detallan más información sobre las normas a los bañistas que deseen disfrutar del paraje natural de las Chorreras del Cabriel.
