El PP siempre miente. Han sido meses generando crispación, alentando el odio y atacando al Gobierno con la amnistía. Semanas fomentando la división entre ciudadanos y manifestándose porque se rompía España, la Constitución y el Estado de Derecho. Tras meses incitando a concentraciones a las puertas de Ferraz y proclamando que los socialistas éramos unos traidores, acabamos de saber que Feijóo nos estaba engañando a todos con la amnistía y con los indultos.
Ahora sabemos que Feijóo, mientras negaba reuniones con Puigdemont, estaba negociando con él, ofreciéndole conceder indultos. Ahora conocemos que Puigdemont ha dejado de ser un terrorista para el PP, al que se debe dar un indulto para la reconciliación. Ahora resulta que la amnistía para Feijóo por supuesto que era negociable. Como dice José Luis Rodríguez Zapatero, el PP a este paso, terminará proponiendo beatificar a Puigdemont.
El PP dijo que los indultos eran un “un golpe de Estado y una humillación”. Aseguró que “eran la claudicación del Estado de derecho y la democracia”. Hasta Ayuso llegó a interpelar al rey y preguntó sobre su complicidad firmando los indultos. Y ahora conocemos que todo ha sido una gran campaña de mentiras y engaños. Todo con un único objetivo, conseguir el poder a cualquier precio.
¿Qué van a hacer ahora los miles y miles de personas que acudieron a las manifestaciones del PP gritando no a la amnistía? ¿Qué van a hacer ahora los que fueron a las concentraciones a la puerta de Ferraz a protestar? ¿Qué van a hacer ahora los que hicieron pintadas de odio en las sedes socialistas -y doy fe de ello, porque a mí también me han increpado por la calle- por apoyar a Pedro Sánchez? ¿Qué harán ahora que les ha explotado las muñecas hinchables en la cara? A este paso en el PP terminarán manifestándose contra ellos mismos. ¡Qué barbaridad!
Todos nos preguntamos ¿qué ha ocurrido? ¿Cómo se explica el giro de 180 grados en la estrategia del PP? ¿Ha sido otro error de cálculo de Feijóo? ¿Es que se le ha escapado sin querer en un off de récord con periodistas de los principales medios de comunicación de este país? ¿O en verdad hay algo más?
A alguien con un colmillo retorcido como Feijóo no se le escapa nada ante un grupo de periodistas sin tenerlo perfectamente estudiado. Feijóo lleva demasiados años en política para cometer un error de principiante. Pero es cierto que algo no previsto ocurrió, porque si no, no se comprende que en el PP se pusieran tan nerviosos para lanzar una nota de prensa a las 12 de la noche del sábado ¿Una nota del PP desmintiendo lo que había dicho Feijóo? ¿De verdad?
Pero el expresidente gallego dijo lo que dijo. Lo escucharon de su propia boca 16 periodistas. No uno ni dos, sino 16. ¿Entonces qué fue lo que sucedió? Lo que ocurrió, es que Puigdemont el día anterior se había plantado. Se plantó y amenazó a Feijóo con contar la verdad de sus contactos y negociaciones.
Tras la votación aplastante de la Junta de Fiscales del Supremo para investigar a Puigdemont por terrorismo, este lanzaba una carta abierta el viernes donde arremetía contra el PP. Y lanzaba una frase contra la línea de flotación de la derecha: “Si Junts hubiese apoyado la investidura de Feijóo los jueces no estarían actuando de esta manera”. Y amenazaba: “Todo se sabrá”.
Y entonces le temblaron las piernas al PP. Tuvieron que salir a contar algo, para evitar que Puigdemont lo contase todo. Y fue entonces cuando Feijóo tuvo que reconocer que habría indultado a Puigdemont, que estudió conceder la amnistía, que la vía para probar el terrorismo contra Puigdemont no tiene recorrido judicial y que es necesaria una “reconciliación” con Cataluña.
Mientras escribo este artículo salta otra noticia de impacto sobre Feijóo: Esquerra Republicana de Cataluña reconoce que Feijóo les ofreció pactar también a ellos su investidura. El PP, que ha soltado demonios contra Rufián, demuestra ahora que estaban dispuestos a pactar hasta con el diablo (según ellos mismos le consideran) con tal de alcanzar el poder. Y esto parece ser solo el principio de las revelaciones sobre lo que el PP ofreció a diestro y siniestro porque, si a los que ellos consideran enemigos les ofrecieron todo, ¿qué no ofrecerían a sus amigos de Vox?
Tras conocer todo esto, Feijóo debe explicar de inmediato sus mentiras sobre la amnistía y sus conversaciones con Junts, con ERC o con el PNV. ¿Qué sabe Puigdemont que ha hecho a Feijóo destapar la olla podrida? ¿Qué le ofreció Feijóo a Puigdemont que no quiere que sepan los ciudadanos? Y es que Junts les “chulea” a los populares diciendo que evita dar nuevos detalles de sus encuentros con el PP, pero advierte que podría hacerlo en el futuro. Los españoles nos merecemos una explicación y cuanto antes. Pero, sobre todo, se la merecen todas aquellas personas que acudieron a las manifestaciones y que a día de hoy se ha demostrado que acudieron engañados.
Feijóo, “el que no fue presidente porque no quiso”, siempre se ha caracterizado por la ocultación en las reuniones mantenidas para su investidura. ¿Qué le ofreció a Puigdemont, a Rufián o a Ortuzar? Resulta que ahora los que no quisieron que fuera presidente fueron Junts, ERC, PNV o incluso Vox, que se negó a apoyarle si lo hacían los anteriores. Nadie estaba dispuesto a votarle.
Sr. Feijóo ¿y qué pasa ahora? ¿Ahora no se rompe España? ¿Ahora el PP no se carga el Estado de Derecho? ¿Ahora la derecha no se vende a independentistas y terroristas? Y por cierto, ¿qué tienen que decir ahora Ayuso y Moreno Bonilla? Fueron muy rápidos para insultar al presidente del Gobierno, pero ahora no se les escucha. ¿Por qué se esconden y no dan la cara?
Sea como sea, Feijóo ha demostrado que mintió en campaña; siguió mintiendo en su investidura y continúa mintiendo tras la investidura de Pedro Sánchez como presidente. El expresidente gallego no le dice la verdad ni a su médico. Alguien así, no merece ni siquiera ser líder de la oposición.
El escenario se le complica y mucho a Feijóo. Hace un mes todas las encuestas de Galicia les daban como ganadores a la Xunta, pero a pocos días de las elecciones gallegas el escenario ha cambiado radicalmente y es muy incierto. Feijóo ha reventado la estrategia del candidato del PP a la Xunta, Alfonso Rueda, quién ahora empieza a tomar plena conciencia de que las elecciones pueden estar perdidas.
Génova ha tocado a rebato frente ante un desconcertado PP. Hay sorpresa, incomprensión e indignación de un sector importante de los populares después de las revelaciones sobre la amnistía y los indultos. De nada sirve que a Feijóo pretenda ahora desmentir lo que sí ha dicho. Ya es tarde. Si algún día el PP tuvo un mínimo de credibilidad la han perdido totalmente. ¡No más mentiras del PP a los españoles!
