Un tribunal de Moscú dictaminó hace unos días que Meta era una organización extremista, y prohibió que las plataformas de redes sociales Facebook e Instagram operaran en Rusia. Las dos plataformas habían sido bloqueadas después de enfrentarse con el Kremlin por contenido que hacía referencia a la guerra en Ucrania. Pero el fallo de la corte incluyó una excepción: WhatsApp.

El fallo permite deliberadamente que la plataforma de mensajería de la empresa, WhatsApp, siga operando en el país. “La decisión no se aplica a las actividades del mensajero WhatsApp de Meta, debido a su falta de funcionalidad para la difusión pública de información”, ah explicado el tribunal, según Reuters. Así, WhatsApp es uno de los pocos servicios occidentales que quedan en Rusia. Aunque la aplicación no se usa para difundir noticias de la misma manera que Facebook o Instagram, expertos rusos sospechan que el Kremlin duda en bloquear las plataformas más utilizadas del país: WhatsApp es muy popular en Rusia, con 84 millones de usuarios mensuales en enero de 2022, según Statista.

Tampoco existe una alternativa rusa WhatsApp,a donde se pudieran dirigir los usuarios. La relación del Kremlin con su competidor más cercano, Telegram, ha sido difícil. Rusia intentó bloquear la aplicación en 2018, pero revocó esa decisión dos años después, y la aplicación acabó prosperando dentro del país a pesar de la prohibición.

De crear un sistema alternativo, Rusia no sería el primer país en buscar una alternativa a las empresas estadounidenses. “Hemos visto que sucede en Irán”, ha afirmado a Wired Natalia Krapiva, asesora legal tecnológica del grupo de derechos digitales Access Now. “Recrearon su propio internet. No funciona muy bien, pero sin embargo, el hecho es que la gente ahora está atrapada allí”