No solo son perros dejados al trauma del abandono: más del 90% no están identificados con microchip, lo que complica “localizar y sancionar a sus dueños en caso de extravío o abandono”, explica la Real Sociedad Canina de España (RSCE), y recuerda en un comunicado que hace 25 años estableció la obligatoriedad de identificar mediante microchip homologado a todos los perros que se inscriben en su Libro Genealógico (LOE), lo que suman unos 60.000 cachorros de raza anuales.

Para la asociación, la principal causa del abandono de perros es el nacimiento de camadas “incontroladas o indeseadas” que dan lugar a cachorros sin identificar. Por ello, piden la colaboración de criaderos y responsables de estos animales para que piensen en su bienestar y asesoren a los posibles dueños antes de que decidan adoptarlos.

Además, reclaman la creación de un registro único de microchips en toda España cuya información, según el presidente de la RSCE, Julián Hernández, tendría que estar compartida por los diferentes cuerpos de seguridad del Estado y Colegios Veterinarios, para poder identificar cualquier perro que se abandone, “y proceder a la sanción correspondiente a su tutor”. Y solicitan que la futura Ley de Protección Animal obligue a identificar a los perros con microchip, porque, de acuerdo con la experiencia de la Fundación Affinity, menos de la mitad de los 80.000 perros que se abandonan cada año en España encuentran un nuevo hogar, lo que satura las protectoras y refugios.