La Fundación Juan XIII ha puesto en marcha Integracamp, un campamento urbano de verano pensado para enseñar a niñas y niños “la importancia de la diversidad y la inclusión”, señala la organización.
En la iniciativa, en la que se han implicado los usuarios de la Fundación, han convivido niños y niñas con y sin discapacidad, realizando distintas actividades y talleres. El objetivo, explica la entidad, ha sido “fomentar la integración social y concienciar desde edades tempranas sobre la discapacidad intelectual”.
La duración este año ha sido de dos semanas en las que han participado más de 40 niños entre los 6 y los 12 años. Han realizado diferentes actividades como talleres creativos de manualidades, debates sobre películas o juegos tradicionales.
Gracias a estas actividades, “los niños han potenciado sus habilidades sociales, trabajado aptitudes y estimulado capacidades como la creatividad, la fluidez verbal o el ingenio”. Todo ello, mientras que, además, han aprendido que las diferencias y la diversidad enriquecen.
Por último, la experiencia se ha ofrecido a los empleados de empresas colaboradoras de la entidad social, para que sus hijos acudan, lo que supone una oportunidad de conciliación laboral para muchos trabajadores.
La edición de este año se ha llevado a cabo junto a la empresa Iveco, en su centro de Madrid. Aranzazu de Miguel, responsable de RSC de Fundación Juan XXIII ha destacado a Europa Press que “con la realización de estos campamentos promovemos la Educación en valores y favorecemos la inclusión social entre niños y niñas, lo que, en cierta medida, nos permite avanzar hacia una sociedad en la que todas las personas tengamos las mismas oportunidades”.
