El músico de jazz improvisa. Por tanto, la inspiración le viene sobre la marcha, es instantánea. Y un estudio que ha desarrollado el Laboratorio de Investigación de la Creatividad de la Universidad de Drexel, que se ha publicado en la revista NeuroImage, ha analizado la actividad cerebral de los guitarristas de jazz durante la improvisación. Y ha detectado que esa rápida creatividad la impulsa, sobre todo, el hemisferio derecho del cerebro en músicos que son comparativamente inexpertos en la improvisación, pero los músicos que tienen mucha experiencia en improvisación dependen fundamentalmente de su hemisferio izquierdo.

Para los investigadores autores del estudio, estas conclusiones sugieren que la creatividad es una "habilidad del hemisferio derecho", esto es: cuando una persona se enfrenta a una situación desconocida, tira del hemisferio derecho. Pero la creatividad se basa en rutinas del hemisferio izquierdo bien aprendidas cuando una persona tiene experiencia en la tarea.

Al tomar en consideración cómo la actividad cerebral cambia con la experiencia, esta investigación puede contribuir al desarrollo de nuevos métodos para capacitar a las personas para que sean más creativas en su campo. Cuando una persona es una experta, su actividad la desarrollan sobre todo procesos automáticos relativamente inconscientes que son difíciles de alterar. En contraste, las actuaciones de las personas que se inician en una activida tienden a estar bajo un control consciente y deliberado, y por tanto, son más capaces de hacer ajustes de acuerdo con las instrucciones dadas por un maestro o entrenador.

Las grabaciones de la actividad cerebral podrían revelar el punto en el que un artista está listo para liberar cierto control consciente y confiar en rutinas inconscientes bien aprendidas. Liberar el control consciente de forma prematura puede hacer que el ejecutante se encierre en malos hábitos o en una técnica no óptima.