Se acabaron las dudas y las discusiones. Todos lo hemos hecho. En cuanto surge una duda en una conversación todos hacemos los mismo. Tiramos de Google y cuestión despejada. Ahora, ¿sabemos qué implicaciones que esa búsqueda tiene en el medio ambiente?

Lo dice Yale

Ahora un informe de la Universidad de Yale ha querido poner datos a lo que supone cada búsqueda en cuanto a contaminación. Como resumen y dato destacado, el informe asegura que el consumo de energía de Google supone emisiones de CO2 por encima de la industria aérea. Casi nada. 

Bajando un poco más en el análisis, los expertos aseguran que las búsquedas se comen un 2% de la energía que se consume en todo el mundo en un año. Sin duda un dato muy preocupante si tenemos en cuenta que cada cuatro años, el tráfico virtual de datos se duplica. 

Los propios responsables de Google lo saben. Cada búsqueda necesita la misma energía que una bombilla de sesenta vatios durante 17 segundos. Esto significa la emisión de 0,2 gramos del CO2.

Y los demás, igual

Además, se espera que la cifra de consumo de energía aumente su velocidad de crecimiento. No solo porque habrá más preguntas a Google. También tienen responsabilidad otros servicios digitales, como Netflix o HBO

Con todo esto, resulta que si toda la industria de este tipo fuera un país, sería la tercena nación que más está aportando al cambio climático, solo por detrás de Estados Unidos y China.
Porque el procesado, almacenamiento y descarga de información supone un importante consumo energético. Alrededor de 1.000 megavatios se van por este motivo cada año.