Quién sabe a los peligros a los que estamos sometidos. Si no tuviéramos bastante con lo que nosotros mismos estamos haciendo al planeta, ahora resulta que un lejano agujero negro lo mismo nos da con un chorro de energía cualquier día.

Un agujero negro que se encuentra en las inmediaciones del centro de la galaxia, a más de 26.000 años luz de aquí. Según los expertos, un agujero negro de aproximadamente el tamaño de 4 millones de soles

Sí, la distancia es enorme y en principio deberíamos estar seguros. Los agujeros negros masivos de este tipo, emiten una serie de pulsos de radiación que pueden recorren largas distancias. Pulsos que aparecen perpendicularmente y que se extienden pudiendo llegar hasta la Tierra

 

Girando de lado

Según los expertos que han reunido información de trece observatorios, el agujero negro del centro de la galaxia, Sagitarius A, está girando de lado. Es decir, su eje de giro coincide con el plano de la Vía Láctea.

Y ahí, en uno de los brazos externos de la galaxia nos encontramos nosotros. Aunque todavía quedan muchos cálculos por establecer según los datos recogidos, cabe la posibilidad de que con la orientación del agujero, su potente chorro de energía a alta velocidad caiga en la Tierra.

Los expertos quieten tranquilizarnos. A esta distancia y con la naturaleza de las ondas del chorro, aseguran que no es peligroso. Que no nos vamos a freír entre rayos gamma. 

Estas conclusiones son parte del proceso de lograr una imagen nítida por primera vez de un agujero negro. Según vamos acercándonos, en conocimiento, a Sagitarius A, vamos comprendiendo mejor las dinámicas que se producen a su alrededor y en el horizonte de sucesos. Y, sobre todo, cómo puede afectarnos en esta pequeña roca a miles de millones de kilómetros.