Un hostelero ha indignado a muchas personas en redes sociales tras mostrar su preocupación en una entrevista en El Español por no encontrar camareros tras "65 entrevistas": “La gente ha recibido ayudas como los ERTE y está mejor en casa que trabajando".

Sergio Pérez ha mostrado su indignación por no encontrar ningún empleado para su restaurante situado en el municipio madrileño de Guadarrama y ha criticado la falta de interés: "No es que los sueldos por convenio en la hostelería sean los más altos, pero las condiciones han mejorado mucho".

"Habrá empresarios que se hayan aprovechado, pero la mayoría no. No es un problema de que los sueldos sean bajos, sino un problema cultural: en lugar de querer aprender y aprovechar oportunidades, la gente pregunta por el sueldo y por si librará el fin de semana", ha señalado en el medio digital.

Otro de los propietarios que aparecen en el reportaje, Adelf Morales, dueño del restaurante Topik de Barcelona también ha proseguido con la misma línea que su compañero de profesión: "La gente se ha dado cuenta de que se está mejor en casa".

"Antes de la Covid, ponías un anuncio y te llegaban 100 currículums. Ahora te llegan unos 30 y de gente poco cualificada, sin experiencia en hostelería, que lo echan por probar a ver si cuela", ha asegurado en El Español.

"Deberían dedicarse a la literatura de ficción"

Tras publicarse el artículo, las redes sociales han cargado contra ambos hosteleros por considerar que el problema de no encontrar empleados deriva de los inconvenientes provocados por los malos horarios, los bajos sueldos y la falta de descanso.

Algunos usuarios reprochan que "hosteleros como Sergio deberían dedicarse a la literatura de ficción": "Si no encuentras camareros y crees que prefieren estar en ERTE es porque, seguramente, no les pagarás lo que deberías, y debe ser bien poco para que prefieran seguir cobrando una miseria en ERTE".

"A un amigo en uno de los restaurantes más conocidos de Sevilla le dicen todas las madrugadas de domingo si trabaja ese mismo domingo. Cobra una parte importante en negro y las horas extras no se pagan. No me explico cómo no se encuentran camareros", añade una joven.

Otras personas van más allá y cargan contra la falta de interés del periodista que ha escrito el reportaje por conocer los sueldos que ofrecen: "Es muy significativo que en todo el reportaje no se mencione ni un solo sueldo".