El anterior Ayuntamiento de Zaragoza (del PP como principal fuerza política) pagó sobrecostes “más que extraordinarios” a Carpas Zaragoza, la empresa a la que contrató para colocar toldos en el barrio de las Delicias y de cuyos servicios dispuso para lo mismo el consistorio de Madrid, liderado por José Luis Martínez-Almeida.
Tal y como ha tenido constancia ElPlural.com, atendiendo al perfil del contratante y según lleva tiempo denunciando el PSOE de la provincia aragonesa el consistorio zaragozano pagó 4.308 euros por unidad mientras que el mismo objeto subvencionado con las mismas características técnicas salió a 320,71 euros -aproximadamente- por unidad.
El documento que refleja estas cantidades se corresponde con un requerimiento del juzgado contencioso administrativo número 3 de Zaragoza y habla de una diferencia “más que extraordinaria” entre las dos adjudicaciones -la de los toldos de la plaza de la capital de Aragón y otra de 2020-. Además, el texto alude a otros conceptos de la subvención que “también parecen elevados o discutibles”.
Desglose presupuestario
El expediente de la operación, que ha podido leer este medio, refleja que el importe pensado para el “estudio diseño y proyecto velas sombraje” fue de 444.359 euros en total.
El resto del montante hasta el total (491.549, 84 euros), lo complementan el “Gasto en gestiones y coordinación de permisos comunidades de vecinos” -15.000 euros-, los “Trabajos de comprobación instalación de 50 toldos. Resolución incidencias” -15.000 euros- y la “Verificación trabajos retirada toldos, depósitos y custodia” (17.190 euros).
Un “agujero negro”
La gestión del barrio de las Delicias quedó se enmarcó en el Plan Local de Equipamiento Comercial del Ayuntamiento de Zaragoza, una especie de cajón de sastre que los socialistas en declaraciones a este periódico tachan como “agujero negro” en el que entraban cosas de muy distinto índole y en el que el coste de las distintas acciones entorno a los toldos -el desglose anterior- no aparece.
“Aquí metieron el plan ‘Volveremos’ o subvenciones que otorga el Gobierno central para reformar plazas”, explica desde el otro lado del teléfono Guillermo Ortiz, portavoz de los socialistas en el área de Economía, Transformación Digital y Transparencia que ha llevado esta semana a pleno la cuestión, al que todavía rodea todo un enorme oscurantismo.
El responsable del PSOE en la provincia habla de “irregularidades evidentes”, atendiendo precisamente al informe de la Cámara de Cuentas, pero recordando también que, coincidiendo con los hechos, incluso “compañeros del PP” en la Autonomía dio al equipo provincial “un tirón de orejas”.
Una controversia detrás de otra
Los toldos que se colocaron en el barrio de las Delicias fueron a todas luces polémicas, hasta el punto de que la propia Cámara de Cuentas -organismo independiente- censuró la operación.
La entidad emitió que “a la vista de la situación, el Ayuntamiento debería haber incrementado su labor supervisora, considerando además que conocía las limitaciones de la asociación y su falta de medios para llevarse a cabo”.
El Ejecutivo socialista denunció en su momento que el precio pagado fuera seis veces superior al precio de mercado, y ahora este periódico ha accedido a las cuantías comparadas. Además, el precio pagado fue trece veces mayor que el que presupuestó la misma empresa adjudicataria, tal y como publicó en mayo elDiario.es
El PSOE señaló también las consultas a ingenierías especializadas para determinar hasta qué cantidad podía ascender la subvención, que dos de los presupuestos aportados eran iguales a los que presentó después el beneficiario y un tercero similar, según la información publicada por el periódico mencionado. Para más inri, una de las firmas es la misma que después resultó beneficiaria.
Ente las controversias se encuentra que antes de concedérsela subvención ya que habría pedido presupuesto o que la concurrencia competitiva en la práctica habría quedado sin efecto dado que fue un servicio del Ayuntamiento quien propuso a la agrupación de comerciantes que contara con esta firma. Cabe destacar que la persona al frente del mencionado servicio es Carmen Herrarte; entonces en Ciudadanos como consejera de Economía, Innovación y Empleo y después en el PP.
Todo sigue igual
En aras de la transparencia, el único partido que votó en contra de una medida que garantizase este principio necesario en democracia fue el PP. Así lo expone Ortiz en declaraciones a ElPlural.com.
“Hablábamos de la necesidad de garantizar la máxima transparencia, haciendo pública y accesible toda la información detallada sobre las operaciones realizadas, el alcance real y su impacto efectivo”, comienza apuntando.
“Esto se aprobó a lo largo de todo el verano y contamos incluso con el respaldo de Vox, pero hasta ahora no se ha anunciado ninguna decisión al respecto ni se ha emitido medida alguna sobre transparencia. Y ni mucho menos se han asumido responsabilidades”, afea el portavoz socialista.
Entretanto, proyecta que solicitó la reprobación de Herrarte, pero no salió adelante. “Y la contratación sigue siendo la misma y los toldos siguen desaparecidos”, concluye la persona que pone voz al fiasco.
Contrato del Ayuntamiento de Almeida
El equipo de Almeida recurrió a la mencionada empresa, cuyo contrato se enmarcaba en una serie de adjudicaciones que alcanzaban en total unos dos millones de euros de dinero público.
La decisión de colocar los toldos llega cuando ya habían empezado las obras en la Puerta del Sol, lo que provocó, por ejemplo, que tuvieran que quitar y hacer trabajos de anclaje- operación que llevaron a cabo en Galicia-. A esto hay que añadirle que la céntrica plaza madrileña ya había sido remodelada o los 11 millones de euros que costó la reforma sin tener en cuenta los toldos.