Eurovisión es el gran evento internacional donde múltiples países comparten sus apuestas musicales, aunque han sido varios los que se han abandonado el barco a lo largo del tradicional festvial. Turquía, por su parte, participó entre 1975 y 2012, este último año se generó un gran debate nacional porque el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, anunció que el país abandonaba el concurso.

La justificación en aquel momento se basí en el el festival pecaba de un tono "opaco y politizado" con su sistema de votación, ya que el país argumentó que este método hacía que se supiera "con anterioridad" quién ganaría, así como la existencia del Big Five, los cinco países fundadores, entre los que se encuentra España que, por el mero hecho de pertenecer a dicho grupo, pasan siempre sin filtros a la gran final. 

A pesar de que llevan alejados muchos años de los focos, los fans del concurso continúan insistiendo en que su país vuelva a participar. Tal y como recordaba Fórmula TV, el director general de la televisión pública de Turquía, Ibrahim Eren, se refirió en 2018 a la por entonces ganadora austriaca, Conchita Wurst, sosteniendo que en su país no podía permitir que se difundiese "en directo a las nueve de la noche, en horario infantil, a un austríaco con barba y falda, que no acepta su sexo, que no admite pertenecer a ningún sexo y asegura ser a la vez hombre y mujer". 

A pesar de las polémicas palabras, en Turquía no ha variado mucho esta postura, pero ahora cabría la posibilidad de que el país diese el paso a regresar a la cita musical internacional. "La TRT no volverá a Eurovisión si no hay cambios en el sistema de votación y nuestro Consejo se mantiene firme en esta postura, pero estamos de nuevo en contacto con la UER" (Unión Europea de Radiodifusión), anunciaba Eren. "El nuevo Supervisor Ejecutivo de la UER es muy bueno, nuestro equipo está conversando con él, pero no sé que pasará en el futuro", aseguró el director de la tele pública Turca.