La vida de Sara Carbonero ha sido una montaña rusa de emociones durante los últimos años. Todo este torbellino de acontecimientos los ha repasado con total sincerdidad en su última entrevista a Harper's Bazaar: su cáncer de hace dos años, su separación de Iker Casillas y sus ilusiones actuales.

Ella asegura que al fin está en "calma" y tomar las riendas de su propia vida, declarándose así feliz. "Estoy conociendo a muchísima gente, estoy en un buen momento, estoy disfrutando. Ha sido un verano atípico, me he intentado llenar de lo bueno y de personas que me hacen sentir bien”, contaba.

A pesar de que no quería ahondar en temas de salud porque son “muy privados e íntimos”, confiesa que no pensaba sufrir un cáncer de ovarios a una edad tan joven: “No sabes de dónde sale la fuerza, fueron momentos muy difíciles, pero siempre pensé que me iba a poner bien”, recuerda, asumiendo así su cambio personal hacia un lado más positivo: “Ahora todo lo disfruto mucho más e hice un crecimiento personal bastante importante”, asegura.

Por otro lado, el revuelo mediático por su vida sentimental y privada siempre ha estado a la orden del día. Su divorcio con el futbolista Iker Casillas, tras 11 años de relación y tres hijos, desvela que lo llevó "con mucha naturalidad". Carbonero sostiene que las noticias "pasan deprisa", por lo que prefiere centrarse en su "proceso personal".

“Hago un ejercicio muy grande de no mirar nada, y la gente que me quiere sabe que no me puede decir nada. Para protegerme a mí misma, no estoy pendiente de lo que se publica”, confiesa. En el mismo sentido, reconoce que ya no le importa tanto la imagen que proyecta de cara al público: “Ya no, he tenido épocas, cuando empiezas en esto, con el boom, y de repente todo el mundo habla. Entonces sientes que tu imagen ya no te pertenece y se distorsiona todo”.

Al ser preguntada por qué es lo que considera libertad, la periodista lo tiene claro, y lanza un mensaje de puro optimismo: "Para mí es fundamental, lo que te hace crecer, a lo que todos deberíamos aspirar. Sentirte con las riendas de tu vida, que es como yo ahora me siento, coger un poco el timón, tomar tus propias decisiones. Ahora yo soy la dueña de mi vida y voy a hacer por estar bien. Y todo estará bien", reflexionaba.