Poco a poco, y tras la celebración de las elecciones del 28A y del 26M, el Congreso de los Diputados recupera su actividad y la normalidad. Ya no sorprende, por ejemplo, ver a Santiago Abascal campar a sus anchas por la Cámara Alta. La actividad aún no apremia, pero ya se pueden ver a diputados ir de allí para acá, de arriba abajo. Y casi siempre con un maletín, el oficial que regala el Congreso. Dicen que las comparaciones son odiosas, y en el tema maletines, no iba a ser distinto.
Según publica El Independiente, los maletines dados a los parlamentarios son de bajo coste, mientras que los que hace un año se compraron para los ministros de Pedro Sánchez fueron de lujo.
Las carteras de los diputados son de polipiel, un material que simula ser cuero. El Congreso ha destinado 12.136,30 euros a la compra de 400 maletines, 50 más de los necesarios en primera instancia por posibles cambios, renuncias etc.
El precio unitario es de 30,34 euros, IVA y estampado de las letras frontales incluidas.
El fabricante ha sido la empresa Piel Galván SL, una compañía situada en Ubrique (Cádiz) y especializada en este tipo de materiales.
Por su parte, el coste de las carteras de los integrantes del Ejecutivo socialista ascendió a 16.500 euros, por lo que el precio por unidad osciló en torno a los 1.000 euros cada uno.
Las diferencias son notables. No solo por el material, sino que son ligeramente más grandes e incorporan elementos como un bolsillo interior, otro exterior, portabolígrafos, tarjetero y con cerradura a elegir: clave o llave.