La sindicalista y analista Afra Blanco ha defendido este sábado una mayor intervención pública en el mercado de la vivienda y ha celebrado que algunos grandes propietarios estén poniendo pisos a la venta. Durante un debate televisivo, Blanco se ha mostrado “encantada” ante el anuncio de la venta de 200 viviendas por parte del empresario Rubén Zaballos y ha expresado su deseo de que esos inmuebles puedan acabar en manos públicas. “Me encantaría que los comprara el Estado”, ha afirmado, en referencia a la necesidad de reforzar el parque de vivienda pública. Las redes se han hecho eco de estas declaraciones y son muchos los que han aplaudido el discurso de la analista. El problema de la vivienda se ha convertido en una de las principales preocupaciones de los españoles, según datos del CIS el 88% de los ciudadanos califican la crisis habitacional como su primera preocupación.
“Entiendo que los capitalistas seguirán tomando Nueva York como ejemplo. Hablar de Economía sin dignidad, es no haber entendido nada”
— 𝗺𝗮𝗿𝗶𝗮_𝗟𝗔𝘁𝗮𝘁𝘂𝘀 💫 (@maria_LAtatus) December 14, 2025
— Afra Blanco (@AfraBlanco) destroza con una sonrisa a otro parásito social, el tal Rubén Zaballos. Otro "bro" que tuvo el "innovador" plan de… pic.twitter.com/GNhwgo7s1J
"El objetivo que tengo para 2026 es vender todos mis pisos porque tengo tres empresas que son más rentables y porque no me está gustando el clima que estoy viendo en este país", ha afirmado Zaballos.
La sindicalista ha señalado que su modelo de referencia en materia de vivienda es Viena, aunque ha asegurado que, siendo “generosa”, estaba dispuesta a poner como ejemplo incluso a uno de los símbolos del capitalismo global: Nueva York. Según ha explicado, la ciudad estadounidense ha demostrado que apostar por lo público puede ir de la mano del bienestar económico.
Blanco ha destacado que, en Nueva York, los votantes han respaldado políticas como el aumento de impuestos a las grandes fortunas y corporaciones, una medida que, ha subrayado, no afecta ni a trabajadores ni a pequeños y medianos empresarios. También ha puesto en valor el incremento del salario mínimo, que ha definido no como un coste, sino como una inversión que genera ingresos y dinamiza la economía.
Asimismo, ha defendido la congelación de los precios del alquiler aplicada en la ciudad durante varios años, asegurando que no supone un ataque a los propietarios, sino una forma de “recuperar la ciudad para todos y todas, y no solo para los ricos”.
En su intervención, Afra Blanco ha planteado que el debate económico actual exige “escoger bando” y ha sostenido que no se puede hablar de economía sin incorporar la dignidad como eje central. A su juicio, quienes han criticado estas políticas deberían decidir entre seguir rechazándolas o asumir el ejemplo de ciudades que, incluso desde el corazón del capitalismo, han optado por reforzar lo público para garantizar el bienestar colectivo. No es la primera vez que Blanco se posiciona en materia de vivienda. “Hay que freír a impuestos a los que compran viviendas para invertir. No son empresarios”, apuntó la sindicalista el pasado mes de noviembre en el mismo programa.