En estos tiempos modernos en los que es tan habitual ver como quienes se consideran más patriotas que el resto por llevar una pulsera con la rojigualda y cambiar términos españoles por otros más chics y normalmente en inglés ligados a las nuevas tecnologías, existen cuestiones con la que la tolerancia debe ser cero.

En las pasadas elecciones generales de mal recuerdo para el Partido Popular, se jugó mucho y mal con el machismo. Mandaban los intereses electorales y, para ser más exactos en el caso de los partidos de la derecha, marcaban el paso los del estudiado que no estudioso Abascal.

Basta recordar –aunque es mejor no hacerlo- la repulsiva alusión de la número uno ‘popular’ por Barcelona, Cayetana Álvarez de Toledo, a las agresiones sexuales y a lo contrario del ‘no es no’.

Comportamientos de este tipo no pueden ser atenuados o blanqueados por un período electoral. Y esto es así porque lo que dicen los representantes de la res publica tiene su repercusión social.

Cibercontrol

En este apartado se podrían situar los vídeos tutoriales que aparecen la plataforma YouTube con un objetivo claro, evidente y denigrante para las féminas en particular, y la sociedad en general: el cibercontrol a sus parejas por parte de los hombres.

El tema no es inocente y el propio Consejo Audiovisual de Cataluña ha emitido un comunicado en el que insta a la retirada de hasta una docena de tutoriales que aparecen con esa temática en la citada red social.

En estos vídeos, según el trabajo realizado desde el CAC, además de justificarse “el cibercontrol de la pareja”, también dan consejos para “espiar los contenidos del móvil de la víctima”.

Dentro de que al denuncia de este tipo de contenidos es gravísima, lo es más que los mismos acumulan casi 23 millones de visualizaciones

En el comunicado hecho público por el Consejo, su presidente, Roger Loppacher, asegura que “los métodos técnicos propuestos suponen una invasión de la privacidad de la persona objeto del cibercontrol”. Además, del análisis realizado se desprende que solo uno de los 12 vídeos mencionados hace referencia al carácter ilícito del espionaje.

Violencia machista

Junto a lo anterior, como no podía ser de otra manera, reconoce el Consejo Audiovisual de Cataluña que algunos vídeos “incluyen también menciones comerciales a aplicaciones que supuestamente facilitarían el cibercontrol, así como el acceso a enlaces para descargarlas”.

Precisamente, desde el CAC se pone en conexión este descubrimiento con la Encuesta de violencia machista en Cataluña 2016, de la que se extrae que el cibercontrol es una práctica presente en el colectivo adolescente y joven con un importante sesgo de género.

No se puede olvidar que este tipo de contenidos son de libre acceso para cualquier persona, de ahí que sería conveniente y positivo que desde la plataforma de vídeos de Google se pusiera freno a este tipo de tutoriales que, además, chocan frontalmente con las propias normas de uso de YouTube.

La petición para la retirada de estos montajes tiene un fundamento que va más allá de la lógica, tal y como ha podido comprobar el CAC. De este modo, simplemente con la búsqueda de términos como espiar novia aparecen decenas de vídeos relacionados con el cibercontrol.

Van más allá las pesquisas del Consejo al indicar que hasta cuatro ámbitos de espionaje proponen estos contenidos y que van desde la mensajería estilo WhatsApp, hasta la fiscalización del uso de redes sociales, en particular Facebook e Instagram, pasando por la geolocalización de la víctima o el control de su teléfono móvil. Casi nada.