Instagram sigue fascinando a expertos y usuarios. El éxito de la red social, ahora parte del “conglomerado Facebook”, se estudia en escuelas de negocio y en comités de dirección de grandes multinacionales y start-ups. Hablamos con Phil González, fundador de Instagramers y experto en redes sociales.

Tiene una mezcla de elitismo afrancesado y de sencillez extremeña que se le nota en el acento, en la postura erguida y en la risa fácil. Es el clásico entrevistado al que no hay que hacer más que un par de preguntas. Si se lo permites, hablará durante horas. Te avisa a toro pasado, entre risas: “Venga, te voy a dejar que hagas tu trabajo”, dice cuando termina una respuesta de doce minutos.

Sin embargo, cada frase, cada afirmación, merecen la pena. Quizá sea más gurú de lo que él mismo piensa, incluso cuando se permite el lujo momentáneo de acreditarlo con hechos. “Es una pena que no le haya dado tiempo al editor a sacarlo, si no, os hablaría de mi libro”, bromea. Promete ser la biblia de Instagram. Lo presentará en Formentera 2.0, el evento sobre nuevas tecnologías y cultura digital que se celebrará del 4 al 7 de mayo, en el que participará como ponente.

“El primer argumento para estar en redes sociales fue porque era divertido”

Para González, las redes sociales son puro entretenimiento. “El primer argumento [para estar en redes sociales] fue porque era divertido. Era un mix de cosas: cotilleo, ego, hablar de uno mismo... Pero en realidad todo era pasarlo bien”. Desde su punto de vista, eso ha cambiado: “Ahora es el FOMO [Fear Of Missing Out] el miedo de estar fuera, el miedo de perderse algo si no estás en una red social”.

Obligatorio para todos

Por eso considera que “hoy no podemos no estar en redes sociales”. Aun así, matiza su propia afirmación: “Más para los urbanitas, pero también para la gente de campo. Tengo una casa en Extremadura y antes de decir algo siempre pienso en mis amigos que viven en una zona más rural. Pero también ellos las usan más de lo que hubiéramos pensado al principio, cuando alguien de un pueblo de León no tenía interés en conocer a alguien de Valencia”.

“El mayor problema de las redes sociales es su continuidad en el tiempo”

Para los negocios esa actividad es fundamental. “Una empresa, si toda su audiencia está en redes sociales, tiene que estar. Es una plataforma fantástica para vender tus productos”.

Peligros para las redes

Su condición de ser “entretenimiento” es, a juicio de González, la razón del éxito de las redes sociales pero también su mayor amenaza. “El mayor problema de las redes sociales es su continuidad en el tiempo. Hace diez años era inimaginable pensar que MySpace, con más de 125 millones de usuarios se iba a ir al garete. Y ya nadie habla de MySpace. No puede nacer una red social sin que muera otra. Y la que nazca tiene que ser más divertida”.

No obstante, la creación de una nueva red social tiene en el momento actual más trabas que nunca. “Si montas algo superdivertido hoy, es muy difícil que sigas por tu cuenta. A menos que tengas la receta mágica o algo como WhatsApp, complicado de replicar, lo mejor es vender, porque si no, sabes que te van a copiar”.

“Es probable que el 15 por ciento de las cuentas de Instagram sean falsas”

El nacimiento de nuevas redes no es el único peligro para la pérdida de interés de los usuarios. Según González, “es probable que el 15 por ciento de las cuentas de Instagram sean falsas”. Esos perfiles son utilizados, principalmente “para lanzar bots que dan likes e incluso hacen comentarios cada vez más acertados, para ser confundidos por humanos”. El objetivo suele ser captar seguidores para “convertirse en alguien interesante para las marcas”. Y recuerda con mirada melancólica los comienzos, “cuando lo único que queríamos era hacer buenas fotos, como aquel amigo que teníamos todos con una cámara buenísima”. 

Instagramers

González es el fundador de Instagramers, una comunidad de usuarios de la aplicación en la que se comparten consejos y se organizan eventos, entre otras actividades. De hecho, Presume de ser uno de los primeros usuarios de esta red social, pero no conozco a ningún fanático de Instagram que no lo haga. “Durante los dos primeros años fue una aplicación de fotografía, pero hoy es un ecosistema de entretenimiento”, asegura.

“En Instagram tendrá cabida todo lo que suponga diversión”

Cuando le preguntamos por el futuro de Instagram, responde con rapidez. “En Instagram tendrá cabida todo lo que suponga diversión”. Y no solo eso: “Una de las cosas importantes que va a incorporar será el e-commerce. También va a ir evolucionando a novedades gráficas, sobre todo realidad virtual. Es muy probable que haya un Instagram con vídeos en realidad virtual grabados en 360 por los usuarios”.

Cuando nos despedimos, la avalancha de información me deja KO durante unos minutos. No sé cómo voy a ser capaz de resumir una conversación que es como el cerdo de su amada Extremadura: se aprovecha todo.